Afonía del Cicerone

  Poquito antes   En los camerinos, unos cinco minutos antes de comenzar el debate, los aspirantes a la gubernatura del Estado de México se encuentran. La primera en llegar a la zona donde está prohibido usar mucho rubor (remember Eruviel y sus chapitas), es Josefina. TE PUEDE INTERESAR Aprueba Cabildo de Nicolás Romero colocación […]

 

Poquito antes

 

En los camerinos, unos cinco minutos antes de comenzar el debate, los aspirantes a la gubernatura del Estado de México se encuentran.

La primera en llegar a la zona donde está prohibido usar mucho rubor (remember Eruviel y sus chapitas), es Josefina.

– Quiero, por favor, que resalte mis ojos, y me pongan un color más radiante en los labios.

Cuando termina la frase se aparece por la puerta principal, que tiene colgado un letrero en rosa mexicano la frase “Aquí los dejamos ojalateados”, Óscar González.

– Puro gel por favor, y maquillaje Ángel Face Caribe, le pide a la maquillista.

Inmediatamente después, y casi en fila, llegan Teresa Castel, que solicita un vasito con agua para tomarse una aspirina. Alfredo del Mazo que ya viene maquillado y peinado. Delfina Gómez que se quedó dormida en el camino de Texcoco a Toluca y pide a la estilista, urgente, una “alaciadita”; Juan Zepeda al que sólo le ponen algo de polvo antibrillo y… se acabó. Hasta ahí nomás.

El kilo de base Mary Kay que utilizarían en la calva de Isidro Pastor se quedó intacto. No le dieron chance al expriísta de agarrar banquito en el debate.

El diálogo que sigue entre ellos, querida lectora- lector, tiene que ser complementado por ti, pues no se detalla quién dijo qué.

Las voces apenas audibles no despejan la duda sobre quién las emite, pero de que el diálogo fue, y estuvo más sabroso que el debate, que ni qué…

“Buenas. Ya todos listos, ¿No? ¿La familia bien Josefina? No empieces. Con la familia no hay que meterse. Mira quién lo dice. Ah, pero el mío es lejano. ¿Y los otros? Todos somos hermanos, hijos de un solo Dios que quiere el reino de la felicidad. ¿Un rayo de esperanza? ¿Hasta los migrantes? ¿Qué pasó, ya comenzamos con los ataques? A ellos mi respeto y cariño. ¿Sólo eso? Por la información que hay sólo eso, porque no les llegó nada más. Se fue en comidas y bebidas. ¿Alguien me habló? Cada quien se pone el chaleco. ¿El de la Uni? A mí no me ha tocado. ¿Pero a poco fuiste a la universidad? A esa no. ¿Entonces? En la vida se aprende más. Además, para gobernar no se necesita tener muchos estudios. Achuuuu. Salud. ¿Mande? ¿Y por qué no dejaron entrar a Pastor? Me lo encontré allá afuera. Está “reflaco”. Me dio muchos papeles. Me dijo que me iban a servir. ¿Ya los leíste? No. Los está leyendo mi equipo y en friega me pasan un resumen. Seguro son sus memorias. ¿Será?

Señores, ¿listos?

Siii.

Antes de salir, les propongo que llevemos este debate con altura de miras. No nos conviene estarnos rompiendo el hocico ante nuestros próximos gobernados. Lo que diga la mayoría. Hay que darle saborcito ¿No? Pero sin mucho calor. Hay damitas. Pactado.

Vamos a empezar señores.

Ya está. Saliendo todos digamos que ganamos el debate. Chiva el que no lo diga. Todos digamos que fuimos los que más atacamos, exhibimos y nos vimos como los vencedores.

Sobres.

A la salida nos rifamos unos tacos aquí en el Alexanders. “Nomás” no le digan nada a Isidro porque se los vamos antojar.

Ya están.

A darle”.

Comienza el primer debate.

Nos encontramos en @gfloresa7