Dar por derrotada a la candidata de la alianza encabezada por el PRI es un error, una sandez. Alejandra del Moral es muy competitiva y su base de apoyo muy poderosa. Sus adversarios la subestiman y la realidad podría terminar dándoles una bofetada. Las votaciones serán muy cerradas, aunque los encuestadores no lo perciban. En Morena no deberían celebrar antes de tiempo, no es serio ni de demócratas; la última palabra la tiene la gente.
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Durante más de 5 años, Alfredo del Mazo preparó, impulsó y cuidó a Alejandra del Moral. Hubiera sido imposible que llegara a donde está sin el apoyo del gobernador. Él la colocó como secretaria de Desarrollo Económico al principio de su administración, después la ayudó para que regresara como presidenta estatal del PRI y se reeligiera más adelante. Para encaminarla a la candidatura la nombró secretaria de Desarrollo Social, creándole el espacio ideal de visibilización y promoción con la “Tarjeta Rosa”. Coronó el periplo con la candidatura no solo del PRI, sino de la alianza con el PAN, PRD y NAEM. Suponer, sospechar, que le hizo todo eso para dejarla sola al final es tonto, pero también malicioso. Nada haría más feliz a Del Mazo y nada le sería políticamente más útil, que entregarle el poder a su elegida.
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Quizá muy pocos, poquísimos mexiquenses, sepan la relación de parentesco entre el delegado especial de Morena para las elecciones en el Estado de México, el senador con licencia Higinio Martínez, y el director de Administración y Finanzas del Poder Legislativo del Estado de México, Luis David Miranda Gómez. Son tío y sobrino. No solo eso; Luis David es uno de los involucrados en el llamado “diezmo”, las retenciones ilegales del 10 por ciento del salario a trabajadores de Texcoco durante la gestión como alcaldesa de la hoy candidata a gobernadora Delfina Gómez. Luis David es socio del “Grupo Empresarial Lumeh, S. A. de C. V.” con sus primos Ernesto Martínez Mejía, María José Martínez Mejía y Ulises Martínez Mejía, hijos de Higinio Martínez Miranda, que habría recibido contratos por al menos 2 millones de pesos pagados con recursos provenientes de las ilegales retenciones salariales. La red de intereses en Morena no es muy distinta a la de su principal adversario político, el PRI, a quien quiere sacar del poder, dice, “por corrupto”.
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Quién iba a pensarlo, pero resulta que uno de los alcaldes mexiquenses con el más alto salario es el del empobrecido municipio de Santiago Tianguistenco, el priista exdiputado Diego Eric Moreno Valle, que mes con mes se mete a la bolsa casi 200 mil pesos libres de polvo y paja. Nadie de las 38 mil personas económicamente activas que se reportan en ese territorio cobra como este político que, por cierto, ha dado muy malos resultados en la gestión de gobierno. Su voracidad es inaudita.
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Lunes de CAMBIO Veinte23, no lo olviden. Hoy, Enrique Vargas, coordinador de la bancada del PAN en la Legislatura local, para hablarnos en su visión del presente y futuro político del Estado de México. Empezamos a las 7:00, como siempre.