Alertan por crecimiento de las autodefensas

Los estados vecinos de Michoacán y Guerrero comparten situaciones extremas en algunas de sus regiones: la apropiación territorial de parte del crimen organizado, la vinculación de grupos delincuenciales a la vida económica, la extorsión a la sociedad, la inseguridad y la impunidad. Por eso es que es previsible que surjan en Guerrero grupos civiles armados […]

Los estados vecinos de Michoacán y Guerrero comparten situaciones extremas en algunas de sus regiones: la apropiación territorial de parte del crimen organizado, la vinculación de grupos delincuenciales a la vida económica, la extorsión a la sociedad, la inseguridad y la impunidad.

Por eso es que es previsible que surjan en Guerrero grupos civiles armados como las autodefensas michoacanas para tratar de arrebatarle el control a los grupos de la delincuencia organizada, dice Miguel Ángel Mijangos Leal, integrante de la organización Procesos Integrales para la Autogestión de Pueblos.

“Toda la parte de la región Norte, Centro y de Tierra Caliente, ese cinturón y buena parte de la región Costa hacia arriba, la parte de Filo Mayor son comunidades que históricamente ha habido presencia del crimen organizado, pero antes  se movían más en esta lógica de ruta y distribución, no de control territorial y vinculación a la vida económica de las regiones”, explica a SinEmbargo.

Otro estímulo para el surgimiento de más grupos de autodefensas es la posibilidad de regularización que ofrece el gobierno, al ofrecer integrarlas a una nómina de guardias rurales, dice el especialista del Centro Mexicano de Derechos Humanos y Democracia (CMDHD), Alejandro Jiménez.

“El gobierno federal está incentivando con esto de la regularización que se aparezcan más este tipo de expresiones de autodefensas, con la parte popular organizada y el apoyo del Estado se está favoreciendo la integración más con las condiciones laborales que prestaría.

Y al blindar Michoacán las periferias del estado van a sufrir un incremento en este tipo de poblaciones relacionadas con el crimen organizado y las actividades que llevan con ellas”, dice.

En otros estados –como en Puebla, Veracruz, San Luis Potosí,  Chiapas, Morelos, Tlaxcala, Hidalgo y Sinaloa– se ha advertido el nacimiento de grupos de autodefensa. En Oaxaca y el Estado de México, el fenómeno sólo creció. Colindante con Michoacán, en Guerrero se tiene conocimiento de que en más del 50 por ciento de los 81 municipios existen autodefensas.

En Oaxaca y en el Estado de México hay presencia de este tipo de grupos en dos municipios en cada estado.

En Puebla, el fenómeno de las autodefensas también va creciendo, aunque las autoridades formales se han empeñado en negar su existencia.

Es un hecho que estas corporaciones ya están en los poblados de San Gabriel Chilac, Chachapa y Tlaxcalancingo, entre otros.

Por su parte, el Movimiento Amplio Social (MAS) ha advertido al gobierno sobre la urgencia de atender las necesidades de seguridad de las comunidades más victimizadas por la delincuencia.

En San Luis Potosí, una agrupación que se hace llamar “Huasteca Armada” se ha hecho presente a través de correos electrónicos y mensajes de emisarios para denunciar el abandono de las autoridades a sus comunidades, donde el Cártel del Golfo y Los Zetas han hecho rehenes a sus habitantes, a través de la venta de protección, extorsiones y delitos patrimoniales. Preparan el ensamble y levantamiento de autodefensas como medida para protegerse.

El fenómeno de las autodefensas puso en jaque al gobierno federal y lo orilló a promover su legalización.

En algunas entidades, esta situación no ha sido bien vista por sus gobernantes, en cambio, en otras sí se promueve la formación de guardias civiles.

El lunes el Gobernador de Sinaloa, Mario López Váldez, dijo que habrá cero tolerancia para quienes tomen las armas en su defensa, ante un grupo de sinaloenses que dijeron estar en contacto con líderes comunitarios de Michoacán para crear su propia policía comunitaria.

En cambio, en el Procurador  de Quintana Roo, Gaspar Armando García Torres, respaldó a los Comités de Vigilancia Vecinal siempre y cuando actúen apegadas al derecho y sean para reforzar el trabajo de la autoridad.

“No es ilegal, no es nada malo, siempre y cuando no se pretendan estar haciendo justicia por su propia mano y no pueden actuar como autoridad, sino como auxiliares y colaborar con la misma.

De hecho está permitido que en flagrancia puedan proceder como una instancia administrativa, y pudieran detener algún sujeto, pero inmediatamente deben ponerlo a disposición de la autoridad a la que corresponda”, explicó Armando García Torres.

(Con información de SINEMBARGO.MX)