Tras ser sustraída por elementos de la Interpol y llevada a Estados Unidos por un reclamo de su presunta madre, una vez que las pruebas de ADN realizadas a la menor guanajuatense Alondra Luna Núñez, reportaron resultados negativos y se comprobó que no es hija de Dorotea García, la adolescente regresó a México en un vuelo procedente del vecino país, informó el periódico Excélsior.
La juez Primero Civil de Los Reyes, Michoacán, Cinthia Mercado García, se deslindó de responsabilidades en el caso. En una entrevista telefónica, argumentó que el juzgado a su cargo solo resolvió una petición de restitución internacional de menores, porque México forma parte de la Convención de La Haya, que salvaguarda los derechos civiles en casos de sustracción internacional de menores, como fue el de Alondra.
Mercado García, afirmó que en ningún caso pudo ella como juzgadora solicitar que las pruebas de ADN se realizarán en México porque no era de su competencia legal el investigar el caso, solo ubicar, presentar y restituir a la menor a las autoridades estadounidenses, quienes la reclamaban.
El caso fue difundido en redes sociales y capturó la atención de la opinión pública, pues mostraba a agentes federales mexicanos que trasladaban contra s voluntad a la menor, a quien sacaron de la secundaria donde estudia, pese a la resistencia y los intentos de zafarse de sus captores.
La Cancillería mexicana, dio a conocer que los agentes cumplían una orden de un juez para que la menor fuera restituida a Estados Unidos; por ello, la menor fue llevada a Texas, donde la esperaba su supuesta madre biológica.
Sin embargo, luego de que sus familiares en México expusieran que se habían llevado a otra niña, las autoridades aceptaron realizar pruebas de ADN que confirmaron que no era la menor que buscaban.
(Con información de Excélsior).