Expone AMLO casos de influyentismo político de María Amparo Casar y del panista Federico Döring

Expone AMLO casos de influyentismo político de María Amparo Casar y del panista Federico Döring
Los casos los documentó en su libro "¡Gracias!"

En su libro ¡Gracias!, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) reveló dos casos de influyentismo político, uno de María Amparo Casar, actual presidenta ejecutiva de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), de Claudio X. González, y otro del político Federico Döring.

El capítulo «La guerra sucia y el desafuero» narra un episodio de 2004 cuando AMLO era jefe de Gobierno del Distrito Federal. El esposo de María Amparo Casar, Carlos Fernando Márquez Padilla García, se suicidó al arrojarse de un edificio de Pemex en la capital.

De acuerdo con AMLO, Casar y el escritor Héctor Aguilar Camín acudieron al procurador capitalino, Bernardo Bátiz, para solicitar que el acta de defunción se modificara, pasando de «suicidio» a «accidente».

Esta alteración permitiría que Amparo Casar recibiera beneficios de Pemex, como un seguro de vida de 17 millones 600 mil pesos y una pensión vitalicia por viudez de 125 mil pesos mensuales. Lo anterior, a pesar de que el esposo de Casar se suicidó y tuviera antigüedad de cuatro meses, cuando estas prestaciones solicitaban dos años.

El presidente asegura que, a pesar de la falta de legitimidad en esta solicitud, el influyentismo prevaleció, otorgando a Casar una compensación económica considerable, a pesar de las circunstancias.

El caso del panista Federico Döring

Asimismo, el presidente Andrés Manuel López Obrador también relató otro caso de influencia política protagonizado por el panista Federico Döring, quien intentó negociar un favor a cambio de cesar sus ataques.

Döring habría enviado a la secretaria de Turismo, Julieta Campos, y al secretario de Gobierno para comunicarle que detendría sus críticas hacia él si un juicio en la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal se resolvía a favor de un amigo suyo. El juicio incluía a un amigo del panista Döring, que era abogado, y las herederas de Samuel Kurian.

El abogado buscaba cobrar, por vía penal, honorarios que, de acuerdo con las herederas, ya se le habían pagado. AMLO señala que este asunto era de carácter civil, no penal.

Lo que quería Döring era que el procurador Bernardo Bátiz cambiara este carácter para favorecer a su amigo abogado. Con ello, el panista frenaría sus ataques contra AMLO; sin embargo, López Obrador «lo mandó al carajo».

Este intento de manipulación judicial, denuncia el presidente, evidencia las prácticas inmorales y antiéticas presentes en algunos líderes políticos, tanto del Partido Acción Nacional (PAN) como del Partido Revolucionario Institucional (PRI).