Una enorme grieta de 200 metros de ancho y 30 metros de profundidad se abrió en un campo de olivos de la aldea de Tepeha, provincia de Hatay, tras el terremoto registrado en Turquía.
Habitantes de la localidad explicaron que durante el fuerte sismo –que ya cobró casi 35 mil muertes– alcanzaron a escuchar un fuerte ruido y vieron escapar de la grieta una luz verde.
Posteriormente, al supervisar el olivar de 35 mil metros cuadrados, se dieron cuenta de que quedó dividido en dos a lo largo de 200 metros.
Mientras tanto, autoridades de ambas naciones dieron a conocer que a una semana del terremoto continúa el rescate de víctimas, pese a que ya comenzó el derribo de algunos edificios.
Autoridades declararon al menos 10 provincias en estado de emergencia, luego del terremoto en Turquía. Lugares prioritarios para el enviar ayuda.