La Cámara de Diputados aprobó en lo general y en lo particular la reforma al Poder Judicial, con 359 votos a favor y 135 en contra, este miércoles, en la Sala de Armas de la Magdalena Mixiuhca usada como sede alterna. Después de más de 11 horas de sesión, con un sonido deficiente y entre gritos de «Viva México», los diputados subieron a una tribuna improvisada para fijar su postura.
La decisión de trasladar la sesión a un recinto diferente se debió a las intensas protestas y bloqueos que han marcado el debate en los últimos días. Los cambios contemplan modificaciones en la estructura interna del Poder Judicial y en el proceso de selección de jueces y magistrados. Se espera que en los próximos días, el Senado revise y discuta la reforma antes de su posible promulgación.
Diputados panistas exigieron a la Mesa Directiva, coordinada por Sergio Gutiérrez Luna, que la sesión no debía llevarse a cabo, debido a la existencia de dos órdenes de suspensión emitidas por jueces de distrito.
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Las reservas
Después de que se aprobó el dictamen en lo general, se presentaron inicialmente alrededor de mil 600 reservas al dictamen, mismas que se redujeron a 68.
¿Qué son las reservas?
En el contexto legislativo, una «reserva» es una propuesta de modificación a un dictamen que se presenta durante el proceso de discusión en el pleno. Cuando se aprueba un dictamen en lo general, se puede reservar un artículo, un párrafo, o incluso una palabra específica para su discusión posterior en lo particular. Esto significa que los legisladores desean realizar cambios o ajustes antes de que el dictamen sea aprobado en su totalidad. Las reservas se presentan, debaten y votan de forma separada del dictamen en lo general.
Entre la ciudadanía ha existido la duda sobre el mecanismo de elección de jueces y magistrados. El constitucionalista e investigador Eduardo Andrade lo explicó en esta videocolumna.

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