Al menos 40 personas murieron y más de un centenar resultaron heridas en el tiroteo que tuvo lugar el viernes en la sala de conciertos de un centro comercial en las afueras de Moscú, Rusia, según informó el Servicio Federal de Seguridad (FSB).
El FSB declaró: «Preliminarmente, como resultado del atentado terrorista en el centro comercial Crocus City Hall en estos momentos hay 40 muertos y más de cien heridos». El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, también expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas, calificando el incidente como una «terrible tragedia» y ordenando brindar asistencia a todos los afectados.
Según informaron los medios de comunicación rusos, tres individuos camuflados abrieron fuego en el ayuntamiento de Crocus en el Óblast de Moscú. Se ha iniciado una evacuación, mientras que algunos testigos relatan que los atacantes arrojaron una granada o bomba incendiaria, desencadenando un incendio en el lugar.
El incendio ha provocado el colapso parcial del techo del edificio, mientras que las imágenes muestran a personas tumbadas en el suelo tratando de escapar del tiroteo. La situación continúa siendo crítica y se están llevando a cabo labores de rescate y atención médica.
La Casa Blanca lamentó el tiroteo, calificándolo de «terrible» y expresando su solidaridad con las víctimas. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, manifestó: «Pensamos en las víctimas de este terrible tiroteo. Las imágenes son simplemente horribles y duras de ver».
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