«El tráfico por el cierre parcial del cruce de avenida Pino Suárez y Las Torres ya está regularizado a una semana del inicio de las obras del tren interurbano Toluca-México, el caos vial sólo se genera durante las horas pico», comentó un policía estatal, el cual nos quiso revelar su nombre por temor a represalias, durante un recorrido hecho por Alfa Diario en el sitio.
Desde las seis y media de la mañana, el uniformado tiene la orden directa de quedarse a dirigir el tránsito de esa zona hasta las ocho de la noche, «ya desde esas horas es difícil pasar por aquí, los embotellamientos dejan a la mayoría de los conductores enojados, por eso luego ignoran las indicaciones que les damos; supongo que les urge llegar a sus trabajos o escuelas», indica el policía sin dejar de menear su mano, la señal universal que tiene para hacer que avancen los autos.
A diferencia del primer día, la construcción fue cercada, los peatones caminan por un carril muy angosto pero exclusivo; el paso para motocicletas está prohibido. Sobre avenida La Torres, se observan muchos vehículos, la mayor parte del tiempo avanzando sin problema, el alto total ocurre sólo cuando el semáforo lo indica; en ese momento policías y trabajadores de la obra dirigen el paso peatonal, tratando de garantizar la seguridad de todas las personas.
Las maniobras que son visibles son la entrada y salida de camiones de carga; el trabajo que hacen las excavadoras es detectado por el ruido que generan. También se pueden observar pilares de concreto, los cuales no estaban antes.
Sobre avenida Pino Suárez en dirección a Toluca el tráfico también es fluido, de hecho hay momentos en que las vialidades parecen desiertas. A pesar de la difusión sobre las vías alternas, la mayoría de personas todavía no las ubica, las señalizaciones aún son muy pocas.
Todo esto ocurre en la primera semana de trabajo por obras del Tren Interurbano México-Toluca que iniciará sus operaciones en 2017 con un recorrido de 57.7 kilómetros. Saldrá desde Zinacantepec, a la altura del Centro Cultural, y tendrá una estación en Pino Suárez, otra en bulevar Aeropuerto y otra en Lerma.
El trayecto será de 39 minutos, tendrá seis estaciones, un túnel de 4.6 kilómetros y estarán en operación de 15 trenes, con capacidad para transportar hasta un millón de pasajeros al año.