Santiago Creel, presidente de la Cámara de Diputados federal, aceptó el error de permitir que militares armados entraran a la Legislatura para hacer honores a la bandera el pasado miércoles.
“Asumo los errores que se hayan cometido, asumo la responsabilidad y me hago cargo de todas y de cada una de las intervenciones, las respeto y las aprecio, las voy a tomar en cuenta”.
Por los hechos, los diputados del Partido del Trabajo (PT), Partido Verde y Morena solicitaron la remoción de su cargo. Gerardo Fernández Noroña, diputado del PT, dijo que no solo se violó la ley, también se le negó el uso de la palabra.
Por su parte, el morenista Leonel Godoy señaló que “en el recinto está prohibida la entrada a personas armadas”. También expresó que el presidente no debía tener ese comportamiento; por lo que se unían a la propuesta de remoción del cargo.
El Partido Verde agregó que coincidían en que Santiago Creel había violado el reglamento por el ingreso de militares armados y por negar el uso de la palabra a las y los diputados.
Santiago Creel respondió y dijo que asumía los errores y aceptaría la solicitud de remoción si esta procedía. Sin embargo, señaló que si bien el reglamento del Congreso no permite el ingreso de militares armados, estos sí deben portar las armas obligatoriamente. Por lo que su intención fue “armonizar ambos mandatos” y por ello la ceremonia se realizó en el vestíbulo.