En una consulta sin precedentes ordenada por un juez, la comunidad Otomí de San Andrés Cuexcontitlán aprobó a mano alzada que la operación del «pozo de agua de San Andrés», construido por el ayuntamiento de Toluca, sea administrado de manera autónoma.
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En la asamblea general en la que participó el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas como órgano técnico y la Comisión Estatal de Derechos humanos del Estado de México como garante asistieron más de 700 habitantes que fueron reunidos con previa convocatoria.
Consulta realizada en la primaria Miguel Hidalgo, en el centro de la delegación de San Andrés Cuexcontitlán. Fotos: Carlos Pérez
El acto fue resultado del cumplimiento de una sentencia dictada en el juicio de amparo 1324/2017-V, impulsado por un sector de la comunidad, quien se inconformó por la falta de consulta y los altos costos del agua.
Y es que el 4 de agosto de 2017 el Ayuntamiento de Toluca puso en funcionamiento el pozo —ubicado en Matamoros s/n, sección III, Santa Rosa— cuya construcción se inició en la administración de Marta Hilda González y que se puso en funcionamiento en el gobierno municipal de Fernando Zamora, para la extracción de agua.
La consulta
Iván Ramos, representante del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, fue el encargado de abrir la asamblea para señalar los antecedentes del proceso y realizar la consulta previa, libre e informada, que establece la ley.
“El juzgado de distrito determina que hubo una violación a su derecho. El juez dice: San Andrés Cuexcontitlán es una comunidad indígena Nahanhu, Otomí y esta comunidad tiene una protección especial sobre sus recursos. El aprovechamiento de sus recursos y todo lo que hay en su territorio es de la comunidad (…) para que se pueda entonces instalar y echar a andar el pozo debe haber una consulta y no es cualquier consulta, es una consulta indígena que tiene que garantizar que esta decisión sea respetada; por eso estamos aquí reunidos”.
En el acto, coordinado por el delegado de la comunidad, participaron más de quince oradores. La mayoría con intervenciones en contra de que el pozo fuera administrado por el ayuntamiento.
«Yo creo que sí podemos administrarlo; el ayuntamiento nos da nada más atole con el dedo. Yo les voy a enseñar el recibo, pago nueve mil pesos al año», expresó uno de los habitantes durante la asamblea.
El Organismo de Agua y Saneamiento de Toluca estuvo obligada a explicar su proyecto técnico y el proceso que desarrolló para instalar el pozo; también, sus motivos para administrar dicha instalación. Por su parte, los demandantes representados por el Licenciado Juan Carlos González Díaz argumentaron los motivos por los que se inconformaron.
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La definición de la comunidad
Posterior a las intervenciones y en virtud de que todas giraron en torno a la administración del pozo, el INPI a través de Iván Ramos planteó que la comunidad debería votar por las propuestas expresadas; es decir, a favor de que se administrara de manera autónoma o por la dependencia de Agua y Saneamiento.
Cerca de una treintena de pobladores apoyaron que la administración del pozo quedara en manos del ayuntamiento de Toluca; sin embargo, la gran mayoría optó por que la población lo administre.
Luego de la votación, el INPI solicitó la opinión de los representantes del Organismo de Agua y Saneamiento de Toluca, quienes expresaron que no podían realizarla; se limitaron a escuchar lo que el juez que ordenó, que quedó estipulado en un acta.
La asamblea en varios momentos se tornó tensa por los distintos puntos de vista; sin embargo, los habitantes calmaron los ánimos y acordaron que la próxima semana sea electo un nuevo comité de agua, quien se encargará de concluir el procedimiento.
Un hecho histórico para las comunidades indígenas del Edomex
El abogado de la comunidad, Juan Carlos González Díaz, celebró la conclusión del procedimiento que se alargó más de 4 años. Además, llamó a que los pueblos indígenas del Edomex hagan lo propio por defender sus recursos naturales.
“Se demuestra que sí se puede. Los derechos ahí están nada más que hay que exigírselos ante un juez federal. Las comunidades tienen que entender que sí se puede y que esos recursos son de ellos, como comunidad indígena todo lo que está en su subsuelo es suyo; entonces, sí tienen su derecho a manejarlo, aparte es bien cara el agua como les quieren cobrar”.
Por su parte Delfino Peña, uno de los habitantes de la comunidad que impulsó el proceso de consulta, resaltó que esta acción es el primer paso para que San Andrés Cuexcontitlán avance en su proceso de autonomía.
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“Este pueblo ha estado muchos años en pie de lucha; las demás administraciones sufrimos represalias por hacer valer la autonomía del pueblo (…) aquí se impuso la razón, sabemos decidir nuestras propias acciones. San Andrés es un pueblo pacífico, va por la autonomía porque ya estamos cansados de las autoridades que nos representan; es el primer paso, porque viendo la necesidad sí vamos por la autonomía se va a generalizar todo esto.” Delfino Peña