Continúan en aumento los casos de ébola en África

Las organizaciones humanitarias en el terreno son claras: En la crisis de ébola que azota el oeste de África, lo peor está aún por llegar. Desde que se produjera el “caso cero” a comienzos de diciembre en Guinea, se han registrado 5.357 contagios por el virus (700 solo en la última semana), con 2.630 muertes, […]

Las organizaciones humanitarias en el terreno son claras: En la crisis de ébola que azota el oeste de África, lo peor está aún por llegar. Desde que se produjera el “caso cero” a comienzos de diciembre en Guinea, se han registrado 5.357 contagios por el virus (700 solo en la última semana), con 2.630 muertes, en cinco Estados diferentes del oeste de África: Guinea, Liberia, Sierra Leona, Nigeria y Senegal.

Y para poner fin a la crisis, las soluciones son tomadas a la carrera. El viernes, Sierra Leona iniciaba un “confinamiento” o “encierro forzado” de 72 horas decretado por el Gobierno para aislar los casos de ébola y permitir al personal sanitario su detección. Conforme a esta medida (ampliamente criticada por las organizaciones humanitarias) todos los ciudadanos de Sierra Leona deberán permanecer en sus vivienda sin poder salir.

En este sentido, el decreto camina de forma paralela a la huelga iniciada por trabajadores del centro sanitario de Kenema, al este del país y una de las localidades más afectadas por el brote. ¿El motivo? El impago de sus salarios por parte del Ejecutivo de Freetown. Y no será por su falta de dedicación: Solo en este centro, al menos 30 trabajadores han contraído la enfermedad.

El caso de Sierra Leona no es único. Recientemente, Brownie Samukai, ministro de Defensa de la vecina Liberia, denunciaba que su país se enfrenta a una «grave amenaza» contra su existencia nacional.

En una comparecencia ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el ministro lamentó que la respuesta internacional frente a la crisis no fue demasiado “robusta” y ahora la epidemia se extiende “como un reguero de pólvora”.

Miles de nuevos casos

Poco antes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) había advertido que esperan miles de nuevos casos de ébola en Liberia antes de fin de mes, donde se considera necesario tomar medidas “no convencionales” para controlar la epidemia.

Según el Atlas de la Sanidad Mundial, publicado recientemente por la OMS, en Liberia, el número de médicos por cada 10.000 habitantes es de 0.1 (en España, de 37). Y eso, teniendo en cuenta que estas cifras son un promedio entre 2006 y 2013. Por ejemplo, antes de que se desatara la epidemia, el número de galenos liberianos apenas era de 250, para una población cercana a los cuatro millones. Sin embargo, desde el inicio de la crisis a comienzos de año, 164 trabajadores sanitarios han sido infectados por el virus (15 en la última semana), con 78 muertes.

“Nuestra situación es deplorable”, lamentaba a ABC George Poe Williams, secretario general de la asociación de trabajadores sanitarios de Liberia (Nahwal).