Daniel Placido, injustamente preso 

Toluca, México; 30 de agosto. Daniel Placido fue aprehendido el cinco de noviembre de 2015. El joven originario de San Pedro Totoltepec, delegación del municipio de Toluca, está señalado como responsable de un presunto secuestro. Sin embargo, desde el comienzo el proceso que atraviesa ha estado colmado de irregularidades. 

Fabricar un culpable 

Ese cinco de noviembre, dos hombres vestidos de negro bajaron de una camioneta: “Ya chingaste a tu madre, tienes una orden de aprehensión”, pero esa orden de aprehensión nunca se la mostraron y tampoco le leyeron sus derechos, expresa Lady Plácido, su hermana. Mientras nos cuenta la historia de Daniel, ella intenta explicarse cómo es que se ejerce justicia en México.

“Yo pienso que aquí a la justicia le ponen precio y solamente la paga quien puede pagarla… La tiene más bien quien puede pagarla y nosotros no, porque nosotros somos gente normal, de trabajo”, comenta Lady luego de platicarnos que la única prueba que hay contra su hermano es el dicho de una sola persona. 

El 18 de septiembre se cometió el supuesto delito y el taxista que fue presuntamente secuestrado reconoció a Daniel como su agresor porque “es moreno, es chaparrito y porque andaba mugroso”. Sin embargo, el día en que pudo haberse cometido el crimen, Daniel pintaba un zaguán; cuando los testigos declararon esto, el juez dijo que eran testigos de coartada y que no valía. 

Antes de ser aprehendido, Daniel tenía una “talachera”, además, cuenta con el título de técnico superior en Informática y “estaba dado de alta en Hacienda”, nos platica el señor Alejandro Placido, su papá. “A Daniel le gusta el futbol, le encantan los animales y una de sus grandes pasiones es cuidar a sus hijos. Es trabajador, siempre cumplido, responsable y solo por estar mugroso lo sentenciaron”. 

Luego de un proceso plagado de irregularidades, el nueve de octubre de 2017, Daniel Placido fue sentenciado a cumplir 65 años de cárcel en el penal de Almoloya de Juárez. 

Injustamente preso 

Sin embargo, de acuerdo con Antonio Lara Duque, el abogado que lleva el caso y director del Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero, la detención de Daniel Plácido fue arbitraria: desde el momento en que se lo llevaron sin una orden de aprehensión hubo faltas al debido proceso, lo cual creó una incertidumbre jurídica y, tratándose de la libertad de una persona, esto no es permisible.

A esa situación se suma el hecho de que la única prueba que hay contra Daniel es el dicho de una persona y, con base en el Código Nacional de Procedimientos Penales, para que alguien sea llevada a prisión es indispensable que haya pruebas científicas o técnicas que sustenten las declaraciones que acusan al inculpado. Respecto a eso, Lady recuerda que ni siquiera había huellas digitales al interior del taxi donde presuntamente su hermano cometió el supuesto delito. 

Por si eso no bastara, hay un certificado médico que da cuenta de la tortura que padeció Daniel luego de haber sido aprehendido, “pero la juez dijo ‘a mí no me importa, ya estás aquí’ y lo vinculó a proceso”, aunque él expresara que “lo jalaban de tal modo que querían tronarle los huesos, el cuello, le daban muchos golpes en la cara, le metieron cosas en las orejas”, nos cuenta Lady para después añadir que cuando su hermano narra la experiencia es horrible. 

A pesar de las evidencias de tortura, ni la Fiscalía General de Justicia ni la Comisión de Derechos Humanos mexiquenses intervinieron. En ese sentido, expresó Antonio Lara, si se comprueba que lo dicho por Daniel es cierto, todo el procedimiento estaría contaminado por violación a los derechos humanos. 

Lara Duque también explicó que cuando a la supuesta víctima se le mostraron cuatro fotos de los probables responsables, la de Daniel tenía un marco que la destacaba del resto cuando en un reconocimiento de fotografía no debe ser así. 

Actualmente, se está sustanciando el juicio de amparo directo en el caso de Daniel Placido, es decir que tanto la víctima del supuesto delito del que acusan al joven de San Pedro Totoltepec, como a las autoridades judiciales del Estado de México están siendo notificadas acerca de la decisión de llevar el caso ante tribunales federales. 

Una vez que hayan sido notificadas, todo lo actuado en el Tribunal de Enjuiciamiento de Almoloya de Juárez y en la Sala Penal de Toluca se enviará al Tribunal Colegiado de Circuito, institución encargada de revisar el amparo que la defensa de Daniel interpuso el pasado 23 de agosto.

Autoridades rebasadas 

Desgraciadamente, Daniel Placido no es el único que se encuentra preso injustamente ya que para cumplir con las estadísticas de disminución de los niveles de incidencia delictiva, la fabricación de culpables suele ser una práctica recurrente de las autoridades encargadas de la procuración de seguridad. 

En ese sentido, Antonio Lara expresó que en casos como el de Daniel la labor de la CODHEM ha sido irrelevante; por esa vía añadió también que la FGJEM fabrica culpables y destroza vidas en aras de presentar números, mientras que el Poder Judicial se muestra indolente e incapaz de exigir estándares altos de investigación.