Daño colateral para vendedores por paro en General Motors

Toluca, Estado de México; 18 de octubre de 2019. Sólo día y medio de paro y únicamente en la planta de motores, pero la suspensión de actividades de General Motors (GM) ya tiene efectos fuera de sus instalaciones: en los puestos callejeros de dulces y comida y en las tiendas y fondas que rodean la zona industrial Lerma-Toluca. Juana, […]

Toluca, Estado de México; 18 de octubre de 2019. Sólo día y medio de paro y únicamente en la planta de motores, pero la suspensión de actividades de General Motors (GM) ya tiene efectos fuera de sus instalaciones: en los puestos callejeros de dulces y comida y en las tiendas y fondas que rodean la zona industrial Lerma-Toluca.

Juana, como accedió a que la nombremos, dijo que trabajó por 21 años en el área de limpieza de General Motors, desde hace dos años vende dulces en las inmediaciones del Complejo Toluca de la empresa automotriz.

“La contadora me dio permiso de vender acá afuera porque me conoce”, dice con cierto entusiasmo y brillo en sus ojos mientras recuerda sus años como parte de la plantilla laboral de la GM.

Pero ella no sabía nada del paro de labores, y como Juana, otras personas que venden dulces, cigarros y refrescos sobre la vía pública dicen que no tenían conocimiento de que la planta iba a suspender actividades este viernes y sábado; tampoco saben que en Estados Unidos la huelga en General Motors está ya en su quinta semana.

Bastó un recorrido alrededor del complejo para corroborar que nadie tiene información sobre la situación de la empresa.

Un ingeniero contratista accedió a charlar brevemente en el acceso que se encuentra sobre Avenida Industria Automotriz. Él y su equipo trabajan en el aplanado y reencarpetamiento de la zona de maniobras que se encuentra entre la planta de Fundición de Motores y la de Ensamble de Motores: “No sabemos nada del paro, nosotros somos contratistas y estamos metiendo nuestras máquinas, sin problema hasta ahora”, dice.

Sobre la avenida Leonardo Da Vinci avanzan los trabajos de repavimentación de esta avenida, por lo que el tránsito está restringido. Los trabajadores dicen que ellos laboran normal y que el personal de la empresa automotriz entra y sale como todos los días.

Aunque el paro sea parcial y sólo de una parte de la planta que fabrica motores, tal como lo confirmó AD Noticias, genera cierta preocupación que el paro se extienda a toda la empresa, porque verían afectadas sus ventas.

Los varios restaurantes de comida corrida que se encuentran sobre Leonardo Da Vinci, Industria Minera, Roberto Fulton y los puestos callejeros reconocen que su economía depende de los obreros que diariamente acuden a trabajar a las muchas empresas que están en esta importante zona industrial.

Y si bien General Motors no representa al cien por ciento de sus clientes, que cierre la planta por la huelga en Estados Unidos, sí les causaría pérdidas.

Este viernes y sábado se decretó un paro parcial de labores por 26 horas en la planta de ensamble de motores del Complejo Toluca de General Motors, que se suma a paros parciales en los complejos de Silao, Guanajuato, y Ramos Azispe, Coahuila.

Aunque en Estados Unidos las negociaciones entre empresa y sindicato no han avanzado, en México, el corporativo emitió un pronunciamiento público que indica que habrían alcanzado un acuerdo parcial para resolver el conflicto laboral que estalló el 16 de septiembre pasado.

“Alentamos a la UAW [Unión de Trabajadores Automotrices] a actuar lo más pronto posible en el proceso de ratificación (del acuerdo) para poder reanudar operaciones y volver a producir vehículos para los clientes. Nuestro objetivo principal durante las negociaciones era asegurar que el futuro de General Motors sea viable para nuestros empleados, distribuidores, proveedores y para las comunidades donde operamos”, dijo la empresa.