Debajo del uniforme. Historia de un policía

La función de la policía es guardar el orden público y brindar a los civiles la protección necesaria, aunque, a veces esa labor se trastoca y los elementos que integran las corporaciones se convierten en una herramienta de represión popular o en parte de l delincuencia organizada. La adhesión a un cuerpo policiaco en México […]

La función de la policía es guardar el orden público y brindar a los civiles la protección necesaria, aunque, a veces esa labor se trastoca y los elementos que integran las corporaciones se convierten en una herramienta de represión popular o en parte de l delincuencia organizada.

La adhesión a un cuerpo policiaco en México puede deberse a varias causas, muchas veces es la convicción, pero desafortunadamente esta razón no es una generalidad; a veces, las condiciones de desempleo hacen de la policía pública y de agencias privadas de vigilancia no la mejor opción pero sí una que permita sostener, a medias, una familia conformada por padre, madre y dos o tres hijos.

Una vez que los policías ejercen su labor, deben pasar por condiciones que en sí mismas provocan ciertos desequilibrios, es el caso de los bajos salarios, la nula o disminuida capacitación, el frágil equipamiento, las propia extracción social y cultural de los que se integran a la policía, entre otras.

Las historias de vida de los policías son tan diversas como cada individuo que existe; conocer una cara distinta a la del oficial que ejerce el poder y la corrupción puede ser tan decepcionante como sorprendente, esta es una breve anécdota de un policía mexiquense.