El presupuesto que asignaron este año los diputados locales al Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) es 1.3 millones pesos menor al del 2018, por lo que apenas tendrá disponibilidad de 640 mil pesos diarios para hacer auditorias especiales, revisar informes de gastos mensuales, recibir y verificar la cuenta pública.
Órganos similares, como el de la Ciudad de México –que tiene bajo su vigía menos entes fiscalizables, en un territorio más compacto y con menos recursos públicos– tiene la oportunidad de erogar más de 1.4 millones de pesos cada 24 horas.
Con los 233.6 millones de pesos asignados al OSFEM para este 2020, se deberá vigilar el manejo que hacen de los recursos públicos 547 entes que este año manejarán más de 350 mil millones de pesos.
Tan solo el gobierno estatal –donde se engloba a los tres poderes, organismos auxiliares y autónomos– el presupuesto contemplado es de 301 mil 184.6 millones de pesos, frente a los 238 mil 975.7 millones que maneja la capital mexicana.
En territorio mexiquense se cuenta también a los 125 municipios con un presupuesto superior a 28 mil 764.2 millones de pesos de recursos federales y estatales, además de 5 mil millones que recaudan de predial, 6 mil 400 millones de agua, entre otros ingresos propios.
Legalmente, a este órgano le compete revisar y fiscalizar los fondos, cuentas públicas, deuda y actos relativos al ejercicio y aplicación de los recursos públicos de las entidades fiscalizables de la entidad, además de regular su organización, funcionamiento y atribuciones.
Entre las 547 entidades que tienen obligación de ser fiscalizadas están los poderes públicos, municipios, organismos autónomos, organismos auxiliares, fideicomisos públicos asimilados y simples, privados y en general cualquier entidad, así como cualquier persona física o jurídica colectiva, pública o privada que haya captado, recaudado, administrado, manejado, ejercido, cobrado o recibido en pago -–directo o indirectamente– recursos públicos del estado, municipios o de la federación, de acuerdo al artículo segundo de la Ley de Fiscalización.
Históricamente, el Poder Legislativo ha decidido de manera interna cuánto presupuesto otorgarle al OSFEM. En 2016 quedó claramente asentado desde la Ley de Egresos el presupuesto que le corresponde al órgano, se arrancó con una partida de 177 millones de pesos y al legislativo se le quedaron mil 404 millones para operar.
Para el siguiente año le aumentaron a 210.5 millones, en 2018 se fue a 234.9 millones que ha sido el monto más alto en toda su historia. Sin embargo, en 2019, con el cambio de legislatura y el recorte que se hizo a todo el Poder Legislativo –donde el monto bajó de mil 817 a mil 508.2 millones de pesos– el OSFEM también resultó afectado y sólo tuvo 227.2 millones.
Para este año, el Legislativo en su conjunto tiene asignados mil 634.4 millones, de los cuales mil 400.8 son para el Congreso y 233.6 millones para el OSFEM. Con esos 233.6 millones deberá fiscalizar a las 547 entidades estatales y municipales, hacer auditorias especiales, revisar informes de gastos mensuales, recibir y verificar la cuenta pública 2019, además de atender los pendientes que quedaron de la cuenta 2018 y las investigaciones especiales al Issemym, ISEM y a la UAEMéx.
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