Comerciantes de la Central de Abasto de Toluca denuncian la presencia de carteristas, robo de autopartes y mercancía en las instalaciones, aun cuando la administración asegura que existe vigilancia privada para disminuir la inseguridad.
De acuerdo con Ana Lilia, comerciante de la Central, los robos se comenten los fines de semana cuando el número de personas incrementa. El modo de operar de los asaltantes es agruparse de tres o cuatro personas, vigilar a su víctima y después hurtar sus pertenencias.
“Nos sacan el teléfono, la cartera; entre la bola van pasando y te roban. Pero ellos ya se dedican a eso, ocho por ocho. Por eso también la gente duda de venir a la Central”, señaló.
El robo a piezas de vehículos también es una constante. Algunos comerciantes denuncian que han sido víctimas de sustracción de pilas en camiones de carga, así como de mercancía dentro de estos, ya sean verduras, productos enlatados o semillas.
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De igual manera, aseguran que por las noches se han robado –dentro de los locales– básculas, dinero o mercancía que queda para los siguientes días.
Administración contra la inseguridad
David Galicia, quien administra la Central de Abastos, aclaró que sí hay inseguridad en la zona –principalmente de carteristas y farderos–, pero no representa un problema grave.
Asimismo, aseguró que, gracias a la Unión de Comerciantes y elementos de la policía, los delitos han disminuido hasta un 80 por ciento. En el mes de mayo se han remitido al ministerio público alrededor de 20 personas por cometer robos dentro y fuera de la Central de Abasto.
“Somos un complejo de 62 hectáreas; a veces se presentan esos problemas, pero nuestra seguridad es bastante eficiente. Afortunadamente tenemos registro de seguridad, porque continuamente le estamos informando a los condominios de esos conceptos: carteristas, roba coches, asaltantes; todo lo que hay aquí y ellos se encargan de tener una pacificación generalizada”, detalló.
David Galicia explicó que, para disminuir la inseguridad, se hace monitoreo de cámaras las 24 horas; asimismo, se cuenta con elementos de seguridad vigilando las 13 naves con, aproximadamente, 1800 locales, divididos en 170 locales comerciales.
Por su parte, Edgar, encargado de la seguridad en la Central de Abasto, informó que se han realizado detenciones por robo de coladeras, robo de mercancía y robo de baterías de camiones. Además, en coordinación con comerciantes –a través de grupos de WhatsApp– se realiza la vigilancia.
En ese sentido, se realizan recorridos generales para retirar a las personas a partir de las 6 de la tarde, ya que en ocaciones hay personas consumiendo bebidas alcohólicas.
Seguridad insuficiente
Otro comerciante, que prefirió mantenerse en el anonimato, mencionó que a pesar de la seguridad privada en la Central, persisten los robos a comerciantes y a compradores. Lo atribuye a que hay mucha gente y la vigilancia no es suficiente.
“Aquí luego vienen hasta bien vestidos y son los carteristas; luego hasta las muchachas son las que se roban los estéreos. Hoy en este día se vive una inseguridad hasta afuera de la casa.
“La seguridad es muy raquítica, aquí andan carteristas trabajando a sus anchas. Los mismos policías no se los llevan porque –me comentaba uno de los policías– detuvieron a un ratero, pero lo tuvieron que soltar para no meterse en problemas”.
Para los comerciantes, el costo de mantenimiento y una renta elevada deberían ser garantía ante el robo de mercancía.
La inseguridad afecta alrededor de 25 a 30 mil personas que asisten los fines de semana a comprar productos para el hogar o para su comercialización.
La Central de Abasto atiende a los municipios de Toluca, Zinacantepec, Almoloya de Juárez, Temoaya, Otzolotepec, Xonacatlán, Lerma, San Mateo Atenco, Metepec, Calimaya Y Mexicaltzingo.