La pregunta es ¿Dónde demonios quedó el Toluca?
La tarde noche de este sábado fue uno de los partidos que más pena ha dado el equipo que dirige José Cardozo. He leído en los últimos minutos severas críticas al planteamiento del paraguayo.
Y es cierto, se equivocó en una formación amarrete y timorata. Peor no es toda la culpa del técnico; los jugadores salieron con un pánico escénico el cual aprovecho América para dar un golpe de autoridad rumbo a la liguilla.
Motivados por el título en la CONCACAF y dejando atrás el cansancio de haber jugado a mitad de semana, las Águilas se llevaron el triunfo en el Coloso de Santa Úrsula, 3-1, sobre Toluca, que de paso le ha complicado su pase a la liguilla.
El partido de la fecha 16 del Clausura 2015, se jugó bajo una lluvia constante pero que no fue factor en la cancha para el resultado a favor de los azulcremas. Los goles del cuadro local fueron obra de Pablo Aguilar, Osvaldo Martínez y autogol de Richard Ortiz; por Toluca descontó Wilder Guisao.
Con este resultado, el conjunto de Copa llegó a 26 puntos y dejó a los mexiquense estancados en 23 unidades. Los dirigidos por Gustavo Matosas están prácticamente clasificados a la fiesta grande, en tanto que, los comandados por José Cardozo se complicaron su pase a la liguilla.
América sorprendió a Toluca con un gol de vestidor a los 2’ mediante Pablo Aguilar para el 1-0. Cardozo se reservó de arranque a Lobos, Amione y Benítez, lo cual afecto el poder ofensivo escarlata.
A pesar del dominio capitalino, que pudo matar desde el primer tiempo a los Diablos luego de fallas de Paulo Goltz y Darwin Quintero, el cuadro mexiquense alcanzó en el marcador a inicios de la segunda tras mediante el colombiano, Wilder Guisao, quien marcó de penal su cuarto gol del torno y tercero de manera consecutiva.
Christián Pérez ya había regalado un balón a Peralta que éste desaprovecho. Empero, el segundo pecado del defensa no lo perdonó Oribe que enfilado a la portería, y justo a la entrada del área, recibió falta de Talavera por lo que el central, Fernando Guerrero, no dudo en marcar la pena máxima. Osvaldo Martínez se encargó de anotar el 2-1 al 75’.
Sobre el final, al 82’, Paulo Goltz peinó el balón y en la trayectoria, Richard Ortiz no pudo evitar que el esférico le pegara en su cuerpo para desviarlo y así marcar en su propia portería el 3-1 que mató a Toluca.