¿Qué se sabe del asesinato en 2007 de los escoltas de Peña Nieto?

¿Qué se sabe del asesinato en 2007 de los escoltas de Peña Nieto?
Autoridades dieron a conocer que levantaron del asfalto más de 200 casquillos percutidos de AK 47.

El 11 de mayo de 2007, cerca de la media noche, un comando armado asesinó a cuatro escoltas de los hijos del entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, en el estado de Veracruz.

Las víctimas, identificadas como Fermín Esquivel Almanza, Erick López Sosa, Roberto Delgado Nabor y Guillermo Ortega Serrano, circulaban del municipio de Boca del Río hacia el puerto de Veracruz en una camioneta Dodge Durango, color gris, modelo 2007, con placas LXU 2400 del Estado de México.

Estaban a dos cuadras de la Plaza de la Soberanía, sobre el bulevar Manuel Ávila Camacho, del puerto de Veracruz, cuando los alcanzó un convoy de cuatro camionetas tipo Cherokee, allí, los sicarios abrieron fuego contra la Dodge, donde viajaban los guardaespaldas.

Según testigos, los elementos de la Agencia de Seguridad Estatal (ASE) intentaron huir, pero los impactos de AK 47, conocidas como cuerno de chivo, dieron en las llantas, lo que propició que perdieran el control e invadieran el carril contrario.

Asimismo, mencionaron que dos de los escoltas fueron acribillados en el interior del vehículo y los otros dos, luego de correr varios metros de distancia, fueron alcanzados y ejecutados en el bulevar costero.

El agente del Ministerio Público, Ramar Mendoza Díaz, quien arribó al lugar junto con personal de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Veracruz (PGJE), dieron a conocer que levantaron del asfalto más de 200 casquillos percutidos de AK 47.

Primeras versiones de los hechos

El procurador de Veracruz, Emeterio López Márquez, en conferencia de prensa, aseguró que, de acuerdo con las primeras investigaciones, «el ataque obedeció a una confusión» del grupo de sicarios.

Descartó que el objetivo del ataque fueran los hijos de Peña Nieto, pues aseguró los guardaespaldas habían terminado su turno y habían salido a cenar.

No obstante, en el Estado de México, Humberto Benítez Treviño, secretario de Gobierno, afirmó que, cuando agredieron a los elementos de la ASE, los guardaespaldas escoltaban la Suburban en la que viajaban los niños, además de la cuñada y los suegros del gobernador mexiquense.

Incluso detalló que, al escuchar los disparos, el chofer de la camioneta donde iban los hijos del mandatario aceleró hasta llegar al hotel donde estaban hospedados, en Boca del Río.

Grupo agresor

Respecto a la identidad de los sicarios, algunos medios de comunicación aseguraron que se trató de un comando presuntamente ligado a Los Zetas, hipótesis que rechazada por el fiscal veracruzano, quien se limitó a señalar que se investigaría.

Sin embargo, de acuerdo con el periódico La Jornada, las primeras indagatorias revelaron que integrantes del cártel del Golfo —ligados a los hermanos Treviño Morales que operan en Nuevo León y que están asociados con Heriberto Lazcano «El Lazca», líder del grupo de sicarios Los Zetas— estuvieron involucrados en la muerte de los escoltas.

Además, autoridades de Veracruz y federales averiguaron que los sicarios detectaron a los escoltas debido a que iban armados. Incluso, antes del enfrentamiento, los elementos de seguridad discutieron con sus homicidas, situación que dio tiempo a que sus ejecutores pidieran «apoyo» a otro grupo de hombres para tirotearlos.

 ¿Qué dijo Peña Nieto?

Al cuestionarlo, Enrique Peña Nieto coincidió con las autoridades veracruzanas en que la agresión contra los escoltas fue una confusión y de igual forma descartó que haya sido un intento de secuestro o venganza contra sus familiares.

Aseguró que no reforzaría su seguridad ni la de su familia y lamentó que las bandas de narcotraficantes estuviesen «centrando sus reales» en la zona turística de Veracruz.

Homenaje luctuoso

El 12 de mayo de 2007, el gobernador Enrique Peña Nieto y sus hijos Nicole, Alejandro y Paulina encabezaron el homenaje luctuoso que se llevó a cabo en el Colegio de Policías para los guardias de la familia Pretelini asesinados en Veracruz.

El discurso fúnebre estuvo a cargo de Héctor Jiménez Baca, comisionado de la Agencia de Seguridad Estatal, quien aseguró que los familiares de los finados recibirían 200 mil pesos como pago de un seguro de vida con el cual contaban, además de un seguro por parte del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM).

Las víctimas

Eric Rey López Sosa, tenía 37 años de edad y estaba casado con Laura López Vázquez, con quien tenía 4 hijos: Laura Yolanda, Diana Isabel, Mayra Alejandra y Fernando Yael.

Guillermo Ortega Serrano, de 34 años de edad, estaba casado con Ana Lilia Santana López y tenían 2 hijos: Alejandro e Ingrid Alexia.

Fermín Esquivel Almanza y Roberto Delgado Nabor de 35 y 24 años de edad, respectivamente, eran solteros.

¿Qué pasó con el caso?

Tras las primeras investigaciones, el fiscal veracruzano dijo que debido al tipo de armas que se utilizaron en el ataque, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) atraería las investigaciones, sin embargo, la dependencia federal se negó, asegurando que el caso era competencia de la FGJE.

Pero, dado que el asesinato de los cuatro escoltas fue atribuido al narcotráfico, la Secretaría de Gobernación y el Gobierno de Veracruz convinieron en desplegar un operativo antinarco en la entidad.

Como consecuencia, la SIEDO terminó atrayendo las investigaciones de la ejecución y las autoridades veracruzanas solo actuarían como «coadyuvantes».

A la fecha no hay resultados ni detenidos por estos hechos.