Toluca, México; 26 de julio de 2018. La iniciativa de reestructuración de la deuda pública estatal del gobernador Alfredo del Mazo Maza, que fue aprobada la tarde del miércoles 25 de julio, reduciría el pago de intereses y representaría un ahorro de 5 mil millones de pesos.
Por su parte, ni el gobierno ni la bancada del PRI, que finalmente aprobó la reestructuración, no han especificado por qué hay desequilibrio en la administración de la deuda pública, que asciende a 45 mil 400 millones de pesos, como tampoco ha definido cómo se llegó a ese diagnóstico. Tampoco nadie se ha referido a los gastos del gobierno del Estado de México ni cómo se pueden aprovechar de manera más eficiente tanto los ingresos de las partidas federales como del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas (FAFEF).
Entre las condiciones favorables que permitieron la aprobación, enlistadas en la exposición de motivos, sobresale que la deuda estatal arroja una cifra relativamente baja con relación a la riqueza que produce la economía local, por lo que con esta supuesta fortaleza de las finanzas públicas, en conjunto con factores como el bajo perfil de la deuda y un mercado estable, se estima que se puede aprovechar una ventana de oportunidad para mejorar las condiciones de financiamiento.
En concreto, el Congreso mexiquense explica que estos beneficios podrán verse traducidos en bajas tasas de interés pero en una ampliación de plazos, así como condiciones de contratación más convenientes, flexibilidad de gestión para fuentes de pago y fortalecimiento de la transparencia. Cabe señalar que el documento especifica que no se pretende adquirir una deuda más, sino optimizar las condiciones de los casi 30 financiamientos con los que cuenta el Estado y que los recursos serán destinados a financiar sectores como el educativo, el de seguridad, el de bienestar y el de inversión pública.
Al mismo tiempo en que se aprobaba la iniciativa de reestructuración también pasó un proyecto anexo con relación a los certificados de la Tesorería mexiquense, Cetes, como pagarés, certificados bursátiles y créditos para agilizar la liquidez del gobierno estatal. El Congreso argumenta que las certificaciones estimularán la competencia en el mercado bursátil, ampliarán las oportunidades de inversión, propiciarán un control más eficiente de los recursos, favorecerán la rendición de cuentas, brindarán atención a los intereses de liquidez y reducirán costos tanto de operación y transacción respecto a la contratación de un crédito bancario.