Fue la policía 

La cerrazón del secretario Aurelio Nuño y el uso de la Policía Federal en contra de los maestros, prendió la mecha del polvorín magisterial, las manifestaciones en diferentes entidades de la república surgieron de manera espontánea y en apoyo a los docentes que estaban sufriendo la violencia del Estado. Las redes sociales dieron cuenta de […]

La cerrazón del secretario Aurelio Nuño y el uso de la Policía Federal en contra de los maestros, prendió la mecha del polvorín magisterial, las manifestaciones en diferentes entidades de la república surgieron de manera espontánea y en apoyo a los docentes que estaban sufriendo la violencia del Estado. Las redes sociales dieron cuenta de estos hechos que ocultaron o distorsionaron la televisión, los medios impresos y radiofónicos oficiales.

El paro indefinido, iniciado el quince de mayo, contra la nueva forma de contratar y despedir a los maestros ─mal llamada Reforma Educativa─, que intentó minimizar  el titular del ramo educativo federal, vociferando amenazas de despidos y presumiendo una reserva de veintiséis mil docentes “idóneos” listos para ocupar los lugares de los profesores que va a cesar en diferentes estados del país, al respecto declaró en Radio Fórmula:

“Sin duda es un proceso que va a tener desafíos, pero para el cual estamos preparados, el número de maestros que tenemos para sustituirlo lo tenemos sobrado”, sentenció.

Estas actuaciones y declaraciones tuvieron un efecto negativo para el gobierno, etiquetado con anterioridad como represor y enemigo declarado del magisterio.

Los desalojos de los maestros en plantón, el viernes  veintiuno y sábado veintidós de mayo, indignó no solo a miles y miles de maestros; la agresión y violación de derechos consagrados en la Constitución en perjuicio de los profesores, logró despertar el apoyo de los padres de familia y parte de la sociedad para defender a los maestros de sus hijos. Los videos y fotos de Chiapas, Oaxaca y Ciudad de México, entre otros, son prueba fehaciente del  enojo y la decepción latente en contra de esta administración, que ha llamado “mal humor social” al rechazo de la actuación gubernativa de este sexenio extraviado en sus reformas y actos de corrupción e impunidad.

En el colmo de los excesos, el miércoles veinticinco del mes que transcurre,  uniformados  de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México, en la caseta de cobro la Venta de la autopista México-Toluca, impidieron el paso de docentes provenientes de Michoacán,  para que no entraran a la capital del país, afectando la circulación de terceras personas desde las siete de la mañana, causando malestar en la ciudadanía, al no permitir que llegaran a sus trabajos y, por supuesto, los medio y las instancias responsabilizaron del daño ocasionado a los profesores, a manera de ejemplo, el Centro de Atención a Emergencias y Protección Ciudadana de la Ciudad de México (CAEPCCM), publicó:

“Manifestantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantienen cerrada la circulación en ambos sentidos tanto de la carretera como de la autopista México-Toluca, provocando severo caos vial”.

Cuando se sabe que fueron los policías de la CDMX quienes provocaron el caos vial, al pretender impedir el paso de los profesores a  la ciudad, para reforzar el plantón de los docentes en contra de las arbitrariedades de la mal llamada Reforma Educativa, instalado en el centro de la capital del país.