Yo era una niña cuando vi por primera vez una quema de Judas, fue en el corazón de nuestra capital mexiquense. En la explanada de la Plaza de los Mártires se congregaban muchas personas que veían arder diablos. Yo solo pensaba una cosa: ¿Por qué?
Crecí y conocí, gracias a mi trabajo, que es más una bendición, que esta tradición nació en el Estado de México en 1993. Por iniciativa del pintor mexiquense, Luis Nishizawa Flores, se convocó a las y los artesanos pirotécnicos de la entidad al primer Concurso de Judas, el cual, desde entonces, se ha llevado a cabo sin interrupción; con sus modificaciones, claro, pues cuidando al medio ambiente se dejaron de quemar.
Los Judas son figuras monumentales de cartón y carrizo, forman parte de las celebraciones religiosas de Semana Santa; representan a Judas Iscariote como símbolo de la traición, pero también se han convertido en la personificación del mal que deber eliminado, por ello se realizaba la quema de las piezas.
Aunque debido al gran trabajo de las y los maestros del arte popular, algunos de estos diablos dan mucho miedo, es importante verlos, conocerlos. Por un lado, para preservar el trabajo de quienes se dedican a las artesanías de cartonería, a través del concurso ellos reciben una retribución que ayuda en su economía y, el público puede darse cuenta de que quien lo crea, se convierte en portavoz del pueblo y, con su habilidad plasma el pensar y sentir de la gente y de los momentos actuales que se viven en la sociedad.
Concurso número 31
El próximo 24 de marzo en el Centro Cultural Mexiquense se llevará a cabo el Concurso número 31. Podrán conocer las piezas participantes, charlar con las y los artesanos sobre sus procesos de elaboración y decirnos cuál te gusta más.
Lo bonito, es que posteriormente los Judas formarán parte de una gran exposición en el Museo —Taller Luis Nishizawa—, que está ubicado en la calle de Bravo, entre Lerdo y Santos Degollado, la entrada es gratuita y pueden ir de martes a sábado de 10:00 a 18:00 horas, los domingos cierran a las 15:00 horas y los lunes, como todo el mundo, no abren los museos.
La muestra estará abierta hasta el 5 mayo y, además de ver los Judas, pueden recorrer el Museo que estará abierto en las vacaciones que se avecinan, y descubrir la bella casona del siglo XVIII, la obra del mexiquense Nishizawa, reconocido nacional e internacionalmente por su gran conocimiento y manejo en las técnicas pictóricas, a través de las cuales conjuga las culturas mexicana y japonesa, rindiendo homenaje así a sus padres.
Muchas gracias y espero que vengan a vivir esta tradición. Nos vemos la próxima.
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