Luego de que el excomandante del Ejército de Bolivia, Juan José Zúñiga, irrumpiera este miércoles en la sede del Ejecutivo de este país a través de la movilización de un contingente militar, acción que se presume como un intento de golpe de Estado contra el gobierno del presidente electo Luis Arce, fue capturado.
Medios locales indican que José Zúñiga manifestó que, supuestamente, todo fue un plan orquestado por el propio presidente con el objetivo de «levantar su popularidad».
El martes pasado, Zúñiga fue removido de su cargo tras emitir amenazas contra el expresidente Evo Morales. Su destitución se produjo en medio de su abierta oposición a la candidatura de Morales para las elecciones de 2025. Sin embargo, lejos de aceptar su remoción, Zúñiga decidió sublevarse contra el Ejecutivo, llevando un tanque del ejército a la sede del ejecutivo y derribando sus puertas.
General Juan José Zúñiga
Desde 2022, Juan José Zúñiga Macías ha ocupado el cargo de comandante general del Ejército de Bolivia. Este miércoles, el comandante declaró que las Fuerzas Armadas (FFAA) tomaron la Plaza Murillo en La Paz debido a una «molestia», y aseguró que se conformará un nuevo Gabinete de ministros. Esta acción fue interpretada por muchos como un intento de golpe de Estado, liderado por Zúñiga, quien se ha manifestado en repetidas ocasiones en contra de la influencia de Morales en la política boliviana.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció este miércoles «movilizaciones irregulares» de unidades del Ejército, señalando la presencia de tropas y tanquetas frente a la sede de gobierno en La Paz. «Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. La democracia debe respetarse», escribió Arce en su red social X.
Morales, a través de su red social X, convocó a una movilización nacional para defender la democracia frente al golpe que, según él, estaba siendo encabezado por el general Juan José Zúñiga.
En sus declaraciones recientes, Zúñiga se ha presentado como un defensor de la patria contra «enemigos internos y externos» que buscan la división y desestabilización de Bolivia. Este jueves, Zúñiga y sus seguidores ingresaron al Palacio Presidencial, frente a la Plaza Murillo, intensificando aún más la crisis política.
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