Guerra contra Estado Islámico será larga: Cameron

El primer ministro británico, David Cameron, afirmó este viernes que la campaña militar contra el Estado Islámico, la organización yihadista que controla partes de Irak y Siria, podría durar años. "Se trata de una misión que va durar no solo meses sino años, pero creo que tenemos que estar preparados para ese compromiso", dijo Cameron […]

El primer ministro británico, David Cameron, afirmó este viernes que la campaña militar contra el Estado Islámico, la organización yihadista que controla partes de Irak y Siria, podría durar años.

"Se trata de una misión que va durar no solo meses sino años, pero creo que tenemos que estar preparados para ese compromiso", dijo Cameron en el Parlamento, al que acudió para pedir permiso para sumarse a los bombardeos estadounidenses contra el Estado Islámico, sólo en Irak, de momento.

"Esta no es una amenaza en el otro extremo del mundo", explicó el primer ministro. "Si no se le hace frente, acabaremos enfrentándonos a un califato en la ribera del Mediterráneo, en la frontera con un miembro de la OTAN (Turquía) y con una determinación declarada y probada de atacar a nuestro país y nuestra gente".

"Esto no es ninguna fantasía, está ocurriendo frente a nosotros y tenemos que hacerle frente (…) Si permitimos al Estado Islámico crecer y propagarse, la amenaza será mayor", advirtió el jefe del Gobierno británico.

"El Estado Islámico tiene que ser destruido", sentenció Cameron, quien dijo que de momento busca sólo permiso para bombardear en Irak y sin desplegar a tropas de combate terrestres, una formulación que sí le permitiría enviar asesores o fuerzas especiales puntualmente. "No quería traer al Parlamento una moción que no tuviera consenso", se justificó.

Se espera que el Gobierno logre la autorización del Parlamento, al contrario que hace un año, cuando buscaba castigar al régimen sirio de Bashar al Asad por usar armas químicas contra la población civil y los diputados se la negaron.

EEUU está al frente de una coalición internacional que está tratando de debilitar a la organización extremista con bombardeos aéreos. Irak ha pedido a varios gobiernos extranjeros esa ayuda, a diferencia de Siria, de ahí las reticencias británicas a extender la campaña al país vecino.

(AFP)