El desplome de un jet privado en la zona industrial de San Pedro Totoltepec, en Toluca, ocurrido el 15 de diciembre, dejó un saldo de 10 personas fallecidas, entre ellas tres menores de edad. El accidente podría derivar en sanciones de hasta 20 años de prisión, de acuerdo con la legislación mexicana.
De acuerdo con la Ley de Aviación Civil, en su artículo 68, obliga a que toda aeronave civil cuente con un seguro de responsabilidad civil vigente para cubrir daños a pasajeros y a terceros en la superficie. El artículo 79 establece que el concesionario, permisionario u operador es responsable de los daños que se causen con motivo de la operación de la aeronave.
Además, el artículo 82 señala que la autoridad aeronáutica debe investigar los accidentes de aviación civil para determinar sus causas y, en su caso, fincar responsabilidades administrativas.
En el ámbito penal, el caso podría derivar en imputaciones por homicidio culposo. El Código Penal Federal, en sus artículos 302 al 304, tipifica el homicidio y prevé sanciones cuando este ocurre por culpa o negligencia. Si se acredita una falla humana, técnica o de mantenimiento, se abre la puerta a imputaciones.
El capítulo II, artículo 60, del mismo documento, agrava las penas cuando, por actos u omisiones culposas graves imputables a personal de empresas aeronáuticas, se causan homicidios de dos o más personas. En esos casos, la sanción puede ir de cinco a 20 años de prisión, además de destitución e inhabilitación para ocupar cargos similares.
Contexto
El desplome de un jet privado en la zona industrial de San Pedro Totoltepec, en Toluca, dejó un saldo de 10 personas fallecidas, entre ellas tres menores de edad. A casi 24 horas del accidente, la empresa propietaria de la aeronave, Jet Pro, no ha emitido un pronunciamiento público.
La aeronave siniestrada fue identificada como un jet ejecutivo Cessna Citation III, matrícula XA-PRO, propiedad de la empresa mexicana JETPRO, especializada en aviación ejecutiva y servicios aéreos. El impacto ocurrió sobre una zona industrial y provocó un incendio de gran magnitud, de acuerdo con reportes de autoridades estatales.
La empresa
Jet Pro se dedica a la renta de jets ejecutivos, helicópteros, vuelos privados, operaciones especiales y servicios de ambulancia aérea, tanto a nivel nacional como internacional. En su sitio web, la compañía afirma ofrecer servicios las 24 horas del día, los 365 días del año. Su presidente y director es Gilberto Ramírez Camacho.
Actualmente, la empresa reporta una flota de 11 jets ejecutivos, entre ellos modelos Gulfstream 450, Citation III, Challenger 601-3A, Hawker 4000, Hawker 800 y 700, Lear Jet 35, 40 y 45, además de un avión ambulancia y un Falcon 900. También opera cuatro helicópteros, incluidos un Augusta 109, un Dauphin, un helicóptero ambulancia y un Bell 407.
Hasta ahora, Jet Pro no ha informado si la aeronave contaba con mantenimiento reciente ni ha aclarado las condiciones del vuelo previo al accidente.
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