El pasado fin de semana inició la campaña de reciclaje de llantas en el Estado de México. La campaña pretende dar tratamiento a cerca de mil 600 neumáticos recolectados en diversos municipios de la entidad mexiquense.
El secretario de Medio Ambiente, Miguel Ángel Contreras Nieto, indicó que una vez que ha concluido su vida útil, las llantas representan un contaminante que tarda cientos de años en descomponerse. Además son un excelente refugio de flora y fauna nociva y tienen un alto poder calorífico por lo que pueden potenciar un incendio y su volumen dificulta su manejo.
Las autoridades han propuesto que las comercializadoras y los distribuidores de neumáticos se encarguen del almacenamiento temporal; en tanto que la recolección estará a cargo de un prestador de servicios de carácter privado.
Actualmente el tratamiento de este tipo de residuos no es el adecuado en la entidad mexiquense. Algunas vulcanizadoras conservan las llantas en sus propias instalaciones; otras las depositan en tiraderos clandestinos. La misma situación ocurre con particulares y trasportista. El funcionario señaló que la contaminación generada por la quema de llantas tiene un alto impacto en la salud de los mexiquenses, por lo cual enfatizó que esta es una práctica prohibida en el estado.
En esta campaña, tres empresas recicladoras se encargaron de dar tratamiento a los neumáticos recolectados y su objetivo es destruir 125 unidades por hora. El proceso de reciclado ocupa una maquinaria de molienda de alto torque que genera pequeños trozos de goma, obteniendo un grano fino y puro; posteriormente, mediante un proceso de limpieza y filtrado, las partículas provenientes del molino son rociadas con adherentes y colorantes naturales, para posteriormente ser utilizadas en parques y jardines.