#JusticiaParaFátima; dan prisión vitalicia a su feminicida
Después de 6 años se hizo justicia para la niña Fátima: un juez dictó prisión vitalicia contra José Juan Hernández Tecruceño, uno de los tres culpables del feminicidio de la menor de 12 años en febrero del año 2015, en Lerma.
Desde que le arrebataron la vida a la joven, su madre, Lorena Gutiérrez, se mantuvo firme en su exigencia de justicia, recorrió las calles con pancartas y consignas en las que evidenció la ineptitud de las autoridades, y aunque su camino fue largo y lleno de barreras, no paró hasta que los culpables pagaron.
Horas antes de que se diera a conocer la sentencia, llevó a cabo una conferencia de prensa en la que deseó que se condenara al tercer agresor, quien a diferencia de los otros dos no se había concluido su destino.
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Aunque por fin se aplicó la ley, su lucha aún no termina. La señora Lorena continuará con la denuncia en contra de cinco instituciones de salud de Nuevo León, mismas que habrían ocasionado la muerte de su hijo Daniel por negligencia médica.
Un sistema que le falló a la infancia
Fátima Quintana Gutiérrez de tan solo 12 años, era una estudiante de primer grado de secundaria, su familia la define como alegre la cual quería a sus padres y hermanos, además de que era el centro de la familia.
A ella le gustaba platicar con su mamá y con su papá acerca de lo que quería ser «de grande». Disfrutaba todos los días como si fueran el último.
5 de febrero de 2015 comienza el infierno
Ese día los hermanos Atayde Reyes acompañados por José Juan decidieron quitarle la vida a la pequeña Fátima cuando regresaba de la escuela, momento en que la sometieron y agredieron.
Luego de ver que la menor no llegaba a su casa, su familia y vecinos comenzaron a buscarla entre la zona boscosa. Su madre desesperada gritaba entre los árboles el nombre de Fátima sin respuesta.
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Después de varios minutos, el hermano de Fátima, Daniel Quintana, de tan solo 10 años, se unió a la búsqueda hasta que, en un montón de hojarasca en una zanja, encontró el cuerpo semienterrado de la niña.
«Recuerdo que Daniel me gritó: ‘mamá, mamá aquí está Tati’. Corrí hasta el lugar, les pedí que me ayudarán a desenterrarla, ‘se está ahogando’. Después de eso ya no supe más«
Daniel: la otra víctima del feminicidio
Tras la muerte de Fátima, su hermano Daniel comenzó con ataques de ansiedad y depresión, padecimientos que tenían que ser atendidos por el sector salud de donde se encontraban viviendo, luego de ser desplazados de su casa en Lerma por amenazas.
«Dany empeoró después del feminicidio de su hermana, ¿y cómo no? Si vio a su hermana desecha, con sangre en su cabeza con su rostro y cuerpo mal«.
Daniel murió el 24 de noviembre del 2020 a los 16 años después de que las autoridades de salud de Nuevo León le negaron la atención. Una doctora le señaló a la familia que se trataba de ansiedad cuando el joven pasaba por un malestar intestinal grave.
«Daniel falleció aún teniendo la protección del Edomex como víctima colateral de un feminicidio el de su hermana«.
Las irregularidades
La familia denunció que durante los seis años que han pasado, las autoridades han cometido múltiples irregularidades como:
- No decir todo lo que fue captado en las fotografías del cadáver de su hija
- No analizar 8 videos que entregó José Juan, en los que presuntamente comprobaba que no se encontraba en el lugar al momento del feminicidio
- No presentar un perito capacitado para la investigación.
El largo camino para las sentencias
El 8 de junio del 2017 un juez del distrito judicial de Lerma de Villada dictó una sentencia condenatoria de 73 años a Luis Ángel Atayde Reyes y cinco años de internamiento para Josué Misael; José Juan fue absuelto el 8 de junio del 2017, esto pese a que familiares y vecinos lo vieron en el momento y lugar del crimen.
Tecruceño fue presentado ante un juez con sede en Lerma, quien lo vinculó a proceso por estos hechos; no obstante, en junio de 2017 le fue dictada una sentencia absolutoria, por lo que fue dejado en libertad.
Sin embargo, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México apeló esta sentencia absolutoria y fue repuesto el procedimiento en su contra, por lo que la autoridad judicial ordenó su aseguramiento.
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Casi 4 años después, por fin se le condenó penalmente. Al respecto, Dilcya Samantha García Espinosa de los Monteros, Fiscal Central para los Delitos Vinculados a la Violencia de Género de la FGJEM, dijo que además de ser un ejemplo importante para otros feminicidios infantiles, se hizo justicia para Fátima y su familia.
Con información de Claudia García, Mercedes Martínez y la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
