A poco más de un mes (13 de octubre) de haber sido colocada de manera simbólica la primera piedra de lo que será la nueva casa del Estadio Nemesio Diez, el inmueble comienza a tener mayor visibilidad en las remociones que sufre la arquitectura longeva de dicho escenario.
A la vista las primeras modificaciones que resaltan son los cuatro puntos en los que descansaran las columnas o torres que van a soportar la estructura en del segundo piso y techo del inmueble.
Trabajadores se les ve circular de un lado a otro, entre pasillos y andadores del inmueble, y lo que en hasta semanas anteriores solo denotaba el sonido del golpeo del esférico o las indicaciones del entrenador paraguayo José Cardozo a sus jugadores, hoy se traduce en ruidos más fuertes y constantes producto de maquinaria pesada, camiones y grúas realizando trabajos más pesados.
Al caminar por el inmueble se puede topar uno con todo trio de trabajadores, arquitectos, ingenieros y personal de labores de remoción. Algunos responsables del mismo en la otrora Bombonera platican brevemente de lo que hasta hoy ha sufrido en cambios el estadio Dos Veces mundialista.
“Es muy poco lo que llevamos, apenas un 10 por ciento si acaso de lo que representa la remodelación; esto apenas comienza y nos falta muchísimo por hace”, señala uno de los ingenieros.
En el 2017, Toluca cumplirá 100 años de vida y la directiva encabezada por su Dueño y Presidente del Consejo de Administración, Don Valentín Díez Morodo, se ha dado a la tarea de contar para esas fechas con un renovado Nemesio Diez.
Con ello, Toluca busca ponerse a la par de otros inmuebles en México como lo es Santos, Chivas, Monterrey, recientemente Puebla, así como otros más que ya se han comenzado a someterse a ese proceso.