¿Quién está preparado para ganar la gubernatura del Estado de México? ¿Cómo estará el humor social en el 2023?
La próxima elección para gobernador ha empezado a ser tema dentro del reducido mundo político de esta entidad. Visto el panorama desde lo general a lo particular, lo primero que salta es que el actual titular del Ejecutivo no tiene, a diferencia de su antecesor, a un presidente de la República del mismo partido que lo pueda amenazar en caso de que pierda la elección. Por el contrario, puede pasar a la historia como un demócrata al estilo Zedillo y aparte tener una embajada. En Bélgica, por ejemplo, para seguir los pasos de su papá.
Dicho sea de paso, la advertencia de expulsión de “Alito” a los exgobernadores que tomen ese camino es una vacilada, porque lejos de perjudicarlos los beneficia, ya que entran blanqueados a sus nuevos cargos y les da la oportunidad de una vida política adquiriendo inmunidad en el más amplio de los sentidos.
En respuesta a la primera pregunta, se puede afirmar que, al momento, ningún partido o alianza está preparada para enfrentar y ganar la elección. Primero tienen que resolver sus procesos internos de selección de candidatos.
En el PAN, un obsesionado diputado local, Enrique Vargas, ha hecho todo lo posible para aniquilar cualquier otra candidatura albiazul que no sea suya o, en su caso, de su esposa. Se le critica que es visceral, propenso a los pleitos y además que no respeta acuerdos, como se evidenció recientemente cuando se autorizó el presupuesto mexiquense, ya que a pesar de haber obtenido un acuerdo innecesariamente trató de exhibir a Morena y a sus diputados cuando ya todo se había votado.
Quizá más de uno se identificó con lo que dijo el secretario de Gobernación Adán Augusto en el Senado: “hay que tener cuidado con los acuerdos con los opositores porque aparentemente los podemos cumplir, pero ellos terminan no cumpliendo“.
En el PRI se vislumbran dos diputados locales: Elías Rescala y Alejandra del Moral. Sobre el primero pesa su escaso trabajo y oficio político, y sobre la segunda que desde su área se filtraron documentos a AMLO que pusieron al borde de la derrota al actual gobernador. Dicen algunos que es un expediente que puede que vea la luz pública en el momento oportuno.
También figuran tres diputados federales y un miembro del gabinete estatal: Ricardo Aguilar, Carlos Iriarte, Ana Lilia Herrera, y Ernesto Nemer. Sobre los primeros dos, sin considerar su perfil, pesa que son cercanos a “Alito”; a la segunda y al tercero se les ve como los posibles campeones sin corona porque no obstante su trabajo, no son bien vistos por el círculo cercano al titular de Ejecutivo y los grillan un día sí y otro también.
Como posible caballo negro, el alcalde de Toluca, Raymundo Martínez, podría colarse como tercera opción, aunque sujeto a resultados y muchas circunstancias.
A todos los une la posibilidad de una alianza PAN-PRI-PRD, encabezada por el PAN, quien aún con el supuesto triunfo, podría dejarlos con un palmo de narices.
En el PRD solo esperan aliarse para ver si así conservan el registro.
En el PVEM lo más probable es que se alíen con Morena a nivel nacional, a pesar de lo que desee su grisáceo líder estatal.
Suerte similar correría el PT, que seguramente participará en alianza con Morena.
En Movimiento Ciudadano se están inclinando por competir solos con el senador Juan Zepeda, por así convenir a sus intereses en términos de financiamiento público.
En Morena se perfila la secretaria de Educación, Delfina Gómez, fortalecida en su aspiración ante una torpe oleada de ataques; así mismo el senador Higinio Martínez que se ve afectado por su pasado colaboracionista con gobiernos del PRI; el titular de la Agencia Nacional de Aduanas, Horacio Duarte, recientemente mencionado por Carlos Ahumada, quien amenazó con exhibirlo; la diputada federal Yeidckol Polevnsky que, con perfil bajo, mantiene su intención de ser gobernadora. Como posible caballo negro, la alcaldesa de Tecámac, Mariela Gutiérrez, sujeta a varias carambolas.
El camino es largo, están unos y otros armando estructuras. Un factor para considerar será el ánimo social. En respuesta a la segunda pregunta, se prevé que los alcaldes de la alianza PAN-PRI-PRD provoquen desilusión y reclamos en la ciudadanía, por sus promesas de campaña inalcanzables, los nombramientos que han realizado y la posible falta de resultados por limitantes económicas, lo que se revertiría en perjuicio de la misma alianza justo en el año de las elecciones.