Ciudad de México, Méx.- “Es un hecho cobarde. He sido siempre una ciudadana. No tengo chofer ni seguridad. Ando en moto. Promuevo siempre el bien entre la ciudadanía. Quiero a mi país y creo que es donde tenemos que trabajar. No más violencia”, fueron parte de las palabras que utilizó Ana Gabriela Guevara Espinoza, senadora sonorense del Partido de Trabajo (PT), al referirse a la agresión que sufrieron ella y una acompañante cuando regresaban de Valle de Bravo.
Con las heridas provocadas por los golpes y clavos en el rostro tras una operación, Guevara se identificó como una víctima mas de la ola de violencia que azota al país, y específicamente al Estado de México, pues calificó el acto de cobardía que vivió como un hecho que le pudo pasar a cualquier motociclista o mujer.
Al indicar los detalles de lo sucedido, la legisladora del PT afirmó que en un primer intento fue agredida por dos personas, momento en el cual logró esquivar el ataque, lo cual provocó que otros dos sujetos intervinieran para derribarla y patearla.
De acuerdo con las declaraciones de Guevara Espinoza, el acto en su contra ocurrió por dos factores. El primero, la desprotección que existe para motociclistas y ciclistas; el segundo, su condición de género, pues los agresores no se detuvieron a pesar de que algún testigo exclamó “es mujer, no la golpeen”.
“No me voy a detener. Tendré que sobreponerme a esto. No es una situación fácil. He dormido por la medicina. Ser legisladora no me exenta de la violencia. Soy una más en éste país”, manifestó con tristeza la medallista olímpica.
Asimismo, la sonorense hizo un llamado para que los testigos que puedan aportar pruebas -ya sea a través de las grabaciones en teléfonos celulares o por medio de testimonios-, apoyen su declaración y completen la carpeta de investigación que permita dar con el paradero de los responsables.