1.- La constante ha sido esa: Donde PAN y PRD logran tejer alianzas, usualmente derrotan al PRI.
Los vimos así en diversos comicios a los largo del país los años recientes, y se confirmó igual en las elecciones de hace 15 días.
Por ello la sola mención de enfrentar en la urnas a panistas y perredistas en coalición, incomoda e irrita a los priístas.
Con la renovación de alcaldías y Congreso local ya a la vista, tan pronto como en julio del 2015, es en esa vía por donde inician los trámites los partidos referidos.
Toluca, Metepec, Ecatepec, Naucalpan y Tlalnepantla, son una posibilidad real de la tóxica alianza.
De otra manera parece imposible derrotar al binomio PRI-Gobierno.
2.- Bajo ésta circunstancia es que dos viejos lobos de mar, beneficiarios por décadas del discurso de la izquierda buena, Domitilo Posadas y Oscar González Yañez, son artífices del
amago de armar frentes únicos en Toluca y Metepec con el PAN.
Falta mucho trecho y si algo caracteriza a ese par es su innegable habilidad para negociar en cortito con…¡Gobierno!
Pero ahora son, por supuesto, parte de los temas que trae en agenda electoral esa área del gobierno del estado.
Es la hora de las oferta y la demanda y todos en eso están.
3.- En algún momento dio la impresión de que sería un opositor férreo tanto del gobierno estatal, como del aplastante dominio del PRI en el Congreso local.
Pero fue simplemente eso, un impresión inicial.
Alfonso Bravo se diluyó y parece haber entrado de lleno a la ruta del colaboracionismo que tanto censuró.
Ya decidió que mejor no va por Toluca y sondea a ver si puede en Metepec.
¿Que le habrá pasado? ¿Donde dejó el discurso que lo estaba caracterizando? ¿Habrá visitado el Cuartito de la Felicidad?
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