El ambiente de violencia que se genera durante el proceso de elecciones en México convierte a candidatas y candidatos en blanco de agresiones de todo tipo. Sin embargo, la violencia también alcanza a personas comunes que hallan en el proceso electoral una oportunidad para contar con un empleo temporal y generar recursos económicos, tal es el caso de los monitoristas de a pie.
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De acuerdo con los últimos informes publicados por el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), se han reportado asaltos, agresiones físicas, amenazas verbales y falsas acusaciones en contra de sus trabajadores. Esto a pesar de que portan una vestimenta que les permite identificarse como empleados del IEEM: sombrero tipo explorador, playera bordada, chaleco café e impermeable.
Los monitoristas de a pie son contratados de tiempo completo por ocho mil pesos mensuales, para recorrer las calles de las entidades que se alistan rumbo a las elecciones del próximo 6 de julio de 2021, tal como ocurre en el Estado de México y sus 125 municipios.
Estos monitoristas se encargan de fotografiar y registrar todo tipo de propaganda política que se expone en bardas, espectaculares, postes y otros espacios públicos. Con la toma de fotografías busca vigilar que se cumplan las reglas políticas del juego, aunque los coloca en medio de un ambiente de tensión.
Por ejemplo, en el municipio de Amecameca, una monitorista sufrió agresión verbal por un grupo de mujeres que trataron de intimidarla y borrarle las fotografías que había tomado, acusándola de pretender robar niños.
En Naucalpan, un monitorista fue agredido por cuatro hombres: cuando se disponía a tomar la foto de referencia de posición, un grupo de cuatro masculinos salieron de un inmueble y de forma violenta lo amenazaron. Le impidieron realizar su trabajo y se tuvo que retirar de la zona.
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Otras incidencias registradas por el IEEM son las caídas de personas, los ataques o mordeduras de perros, y los asaltos, donde los monitoristas son despojados de su herramienta de trabajo. Así fue en Nezahualcóyotl, la mañana del 6 de febrero al tomar las fotografías de una propaganda, un vecino de la zona se acercó al monitorista y “de forma agresiva le quitó momentáneamente el dispositivo, borró las fotografías y amenazó con dispararle si no se retiraba”.
Los municipios de Amecameca, Naucalpan, Tenancingo, Texcoco, Cuautitlán Izcalli y Chimalhuacán son los puntos donde han ocurrido los incidentes, según reportó el IEEM en su primer informe quincenal de Intercampaña correspondiente del 17 de febrero al 3 de marzo de 2021; y de precampaña del 26 de enero al 11 de febrero del mismo año.
Durante los mismos lapsos, una decena de monitoristas que ya habían aprobado un proceso de selección donde se incluye un examen renunció por «motivos personales» o tras encontrar otro empleo, principalmente, según los informes.