Quien cubre la función pública de servir no solo debe tener una experiencia profesional desarrollada en tareas públicas, políticas o administrativas, es vital que cuente con un buen manejo de sus emociones.
Alejandro Gutiérrez Cedeño, coordinador del Centro de Estudios y Servicios Psicológicos Integrales de la Facultad de Ciencias de la Conducta señaló que para ser servidor público es necesario entonces tener capacidad de comprensión, objetividad y de no enganchar temas evidentemente personales con sociales, políticos y públicos.
Si no se tiene una estructura psicológica sólida, detalló, se pueden desbordar las emociones y caer en actitudes de alarma de una mala salud mental como falta de sensibilidad, comprensión, resolución de problemas, comprensión y entendimiento de un contexto.
“En el ámbito de la psicología se busca además que estén controladas las emociones como la ira, el enojo, la aversión y a veces hasta la alegría, porque puede llevar al apasionamiento por las cosas“, agregó el especialista.
Perfil psicológico sano
Gutiérrez Cedeño puntualizó que para determinar un perfil psicológico lo más importante es conocer el desarrollo de habilidades cognitivas relacionadas con las capacidades de pensamiento, análisis, de priorizar o jerarquizar y de tomar decisiones, que sería la más importante; pero también de las afectivas como la empatía, las relaciones interpersonales y por supuesto la capacidad emotiva, que es tener la sensibilidad para poder entender y comprender que los seres humanos afrontan la vida y sus pérdidas de diferentes formas.
Trastornos y poder
El psicólogo afirmó que el poder no es consecuencia de una manifestación clínica o patológica en las personas, sin embargo, admitió que puede generar algunos signos o síntomas de neurosis.
“La neurosis es un conjunto de signos y síntomas en la personalidad, que puede ir desde una simple irritación, hasta euforia, agresión y evasión, y estos se van transformando en miedos, temores y manías que pueden llegar a la psicosis”, explicó.
Precisó que no hay una regla en salud mental, pero en el momento en que una persona deja de darse cuenta de su texto, su contexto y su escenario es cuando vienen las complicaciones.
“Podemos accesar, y sin darnos cuenta, a temas de minusvalía, porque por un lado puedo pensar en que no valgo nada, pero por otro caer en la prepotencia y ahí es donde se ve una clara manifestación del uso excesivo del poder, de quien no lo domina o controla, y cuando me dejo de dar cuenta se atraviesa la línea de la neurosis a la psicosis”, reveló.
La línea es muy delgada, abundó el coordinador del Centro de Estudios y Servicios Psicológicos Integrales de la Facultad de Ciencias de la Conducta, y puede suceder por una noticia desgarradora, por una pérdida irreparable, por un conflicto complicado.
“Depende de la infraestructura psicológica y la resiliencia mental de cada persona. Podemos tener psicóticos por pérdidas irreparables o psicóticos por una circunstancia laboral que se fue de las manos, se puede empezar con mitomanía y pasar a la megalomanía, que es cuando se genera un escenario de mentiras y sucesos”, señaló.
Por ello, destacó, es necesario el tratamiento clínico o acudir con profesionales para que nos ayuden al manejo de emociones y que ello permita perfilarnos de manera normal en el entorno que nos rodea.
Caso Raymundo Martínez
Regidores, delegados y ciudadanos de Toluca han cuestionado la salud mental del alcalde Raymundo Martínez Carbajal y han solicitado que se le realice una prueba psicológica, ya que consideran que sus actitudes no son normales además de que no tiene control de sus emociones, principalmente de la ira.
El presidente municipal ha rechazado dichas afirmaciones, aludiendo que los enfermos son ellos.
“En estos tiempos está tan mal la situación que ahora quien obedece la ley y la hace obedecer está enfermo. Fíjense, qué situación tan curiosa. Yo más bien pensaría que se las hagan a quienes sugirieron eso“, respondió.
Lo cierto, es que en diversas situaciones ha quedado evidente el carácter del funcionario priista, que le ha generado problemas personales y profesionales.
Como muestra están los encuentros verbales con regidores que no están de acuerdo con su manera de gobernar y los hechos en torno a su familia, que derivaron en acusar a su suegro de robar dinero público y dejar sin el cargo a su esposa.
Pero el caso más reciente, fue lo sucedido con el regidor de Morena, Mario Cardoso, a quien, por solo despintar las líneas de los cajones de los parquímetros virtuales, lo arrestaron y golpearon con todo un operativo de policías.
Recomendaciones para el control de la ira
De acuerdo con el especialista en Psicología, Alejandro Gutiérrez Cedeño, la ira es una emoción desbordada que básicamente hace referencia a la venganza, el enojo y la violencia. Es una desesperación incontrolada que te lleva a cometer desde errores hasta delitos asociados a comportamientos de agresión física y verbal.
Desde su punto de vista son muchos los factores para detonar esta emoción, aunque el más común es la frustración, cuando no se logra un objetivo.
A quienes tienen este padecimiento y no quieren atenderse se les sugiere recurrir a técnicas de relajación que permitan entrar en un estado de mayor comprensión de lo que ocurre, sino quiere.
Aunque, indicó, que lo recomendable es tomar alguna terapia psicológica:
- La conductivo-conductual, que consiste en entender y comprender lo que pasa y modificar conductas.
- Terapias breves o de emergencia, que pretenden solo establecer un equilibrio de manera inmediata.
- El psicoanálisis que es un proceso más profundo y largo, pero que también puede contribuir al equilibrio de las personas
“Muchas de las cosas que hacemos o actuamos son en la imprudencia o la euforia, sin el manejo de las emociones adecuadas. Las personas no modifican su conducta porque no han entrado en una etapa de razonamiento y comprensión de lo que les esta ocurriendo, por lo que considero que esta sería una técnica muy importante”, comentó.
¿Por qué es importante conocer el estado de salud de nuestros gobernantes?
El estado de salud es una comprobación de la toma de decisiones y medidas gubernativas
La ley que regula la categoría de los datos personales reconoce como dato sensible el estado de salud de cualquier persona, sin embargo, existe precedente de la SCJN que reconoce que las personas públicas, entre ellas los gobernantes, y especialmente los elegidos por la vía de las urnas, deben admitir un mayor escrutinio sobre este tema, pues su condición, investidura de autoridad y sus actos implican afectación a la población.
Antecedentes
En 2008 y 2011, el senador Ricardo Monreal presentó dos iniciativas que contemplaban el derecho a conocer el expediente clínico del presidente, funcionarios públicos y candidatos.
El argumento para conocer el estado de salud de los gobernantes se origina en función de la obligación que tienen los gobiernos democráticos de garantizar a los ciudadanos que se pueda analizar, juzgar y evaluar el desempeño de sus representantes y que “la salud de estos la padecemos todos”.
De tal suerte que el acceso al expediente clínico de jefes de Estado o de gobierno se justifica por el interés público y es un derecho saber las enfermedades que los aquejan, sobre todo las que afecten o pongan en riesgo su desempeño o la gobernabilidad.