La Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) ha cumplido con el pago íntegro y puntual de la nómina correspondiente a la primera quincena de mayo para su personal docente, a pesar del paro estudiantil que mantiene bloqueadas más de 19 facultades y espacios académicos.
En una consulta realizada por AD Noticias a profesores y profesoras de distintas áreas —Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Economía, directores de preparatorias, docentes de tiempo completo y maestros por horas—, todos confirmaron que sus percepciones económicas fueron depositadas en tiempo y forma, sin descuentos ni contratiempos.
La información fue corroborada por Ginarelly Valencia Alcántara, directora de Comunicación Universitaria, quien aseguró que la nómina de la UAEMéx no se ha visto afectada. Y que la institución ha cumplido con sus obligaciones salariales en los términos previstos.
El conflicto estudiantil sigue sin resolverse
El paro estudiantil comenzó el pasado 29 de abril en la Facultad de Humanidades. Impulsado por demandas de voto universal en la elección de autoridades, mayor transparencia en la sucesión a la Rectoría y la atención efectiva a casos de violencia de género.
Desde entonces, la movilización ha sumado el respaldo de estudiantes de otras facultades, extendiendo la suspensión de actividades a buena parte de la universidad.
El pasado 14 de mayo, tras la renuncia de Carlos Eduardo Barrera Díaz, el Consejo Universitario designó a Isidro Rogel Fajardo como rector interino. Su mayor desafío será abrir un canal de diálogo con las asambleas estudiantiles y negociar las condiciones para el restablecimiento de las actividades académicas.
Paro indefinido: la postura estudiantil
Sin embargo, el panorama sigue siendo incierto. A 17 días del inicio del paro, las asambleas han reiterado que la suspensión de actividades será indefinida. Mientras no se atiendan sus exigencias de manera formal y transparente.
La administración central enfrenta así una prueba crucial. Que consiste en restablecer la gobernabilidad universitaria sin menoscabar las legítimas demandas de una comunidad estudiantil. Misma que reclama voz y voto en las decisiones fundamentales de la institución.
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