La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney, firmaron este miércoles en Palacio Nacional un Plan de Acción Binacional que marcará la agenda bilateral en cuatro ejes: prosperidad, seguridad, inclusión y sostenibilidad.
Carney citó a Benito Juárez para subrayar el espíritu del acuerdo: “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”. Añadió que ambos países son “más fuertes unidos” y que la cooperación bilateral será clave de cara a la próxima revisión del T-MEC, que consideró el pilar de la competitividad norteamericana.
Sheinbaum coincidió en que el tratado comercial ha sido esencial para la región y aseguró que, pese a los aranceles impuestos por Estados Unidos en sectores como el acero y el automotriz, México y Canadá mantienen exportaciones sólidas. “Estamos seguras de que el Tratado va a permanecer”, afirmó.
Seguridad y migración laboral
La mandataria mexicana detalló que se abordaron mecanismos de cooperación en seguridad, en particular en ciberseguridad, tema en el que Canadá tiene experiencia. “Nos interesa mucho conocer cómo trabajan este tema y que pueda haber colaboración en términos de las mejores prácticas”, dijo.
También se revisó la situación de las visas de trabajo temporales para mexicanos en Canadá. Sheinbaum precisó que el programa se mantiene sin cambios, aunque habrá mesas técnicas para analizar una eventual ampliación.
Carney, por su parte, reconoció la presencia de grupos criminales de ambos países operando de manera trasnacional y aseguró que reforzarán la coordinación para que “ningún delincuente escape a la justicia”.
Comercio e inversiones
A pregunta expresa sobre el intercambio económico, Carney recordó que en tres décadas de libre comercio la relación comercial se ha multiplicado por diez. Aunque evitó dar una cifra exacta de crecimiento esperado, afirmó que la escala del plan acordado permitirá “una inversión aún mayor, porque nuestras economías estarán alineadas y nuestra visión es la misma”.
Sheinbaum destacó que la reunión, más allá de lo protocolario, fue de trabajo abierto y directo con el primer ministro canadiense y empresarios, con el fin de fortalecer tanto las inversiones como el comercio bilateral.
Una relación trilateral en juego
Ambos líderes coincidieron en que la Cumbre de Líderes de América del Norte podría retomarse tras la revisión del T-MEC. Ante la posibilidad de presiones de Estados Unidos, Carney aseguró que Canadá y México no se dividirán: “Sin duda alguna, vamos a trabajar de manera conjunta para llegar a un T-MEC mejorado”.
Sheinbaum concluyó que la prioridad es garantizar que el acuerdo comercial siga siendo “lo mejor para los tres países” y que las discusiones actuales refuercen la competitividad de la región.
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