Que las autoridades hagan lo que deben: periodista Tere Montaño

Que las autoridades hagan lo que deben: periodista Tere Montaño
La periodista demanda a las autoridades que le brinden garantías de seguridad a ella y a su familia

Mi seguridad ahora depende de que las autoridades hagan bien su trabajo, expresó la periodista mexiquense Teresa Montaño en un mensaje publicado en el portal The Observer. El viernes, ella estuvo secuestrada durante al menos tres horas; las autoridades mexiquenses, hasta el momento, solo se limitaron a decir que ya iniciaron la investigación.

Para entender mejor: Secuestran y agreden a periodista Tere Montaño en Zinacantepec

En su carta pública, Montaño se refirió al suceso como las horas más oscuras de su vida. Sentí en el aire, en la oscuridad y en cada poro la soledad profunda de las víctimas de este país, escribió respecto al tiempo que la privaron de su libertad.

Junto con su auto, su laptop, su celular, dinero, archivos, entrevistas y documentos de investigaciones que tiene en marcha, sus agresores también se llevaron mi calma, mi paz y hoy vivo bajo la amenaza de que volverían por mí si denunciaba. Y lo hice.

A pesar de eso, sostiene que no quiere relaciones públicas, sino que las autoridades hagan lo que deben y que garanticen su seguridad y la de su familia: no creo en la seguridad y la justicia que se negocia. La justicia es o no es.

Un día antes de que se publicó la carta de Montaño, Ernesto Nemer, secretario general de Gobierno de la entidad, solo dijo a los medios que las investigaciones continuaban y que tanto la Fiscalía como la Secretaría de Seguridad le estaban dando acompañamiento.

El fiscal general de la entidad, Alejandro Gómez Sánchez, se abstuvo de hacer comentarios al respecto.

Lee: Omite gobierno mexiquense detalles sobre avances del caso de la periodista Tere Montaño

Los apoyos y el respaldo a Teresa Montaño han llegado de personas cercanas a ella, de asociaciones, de medios y de organizaciones que defienden los derechos humanos.

Gracias porque el coraje de quienes no se dejaron intimidar, me sostuvieron en su enojo, a sabiendas de que la o el próximo podría ser cualquiera y porque han mantenido la exigencia de seguridad y de justicia para mí y los míos, que son ustedes.