Toluca, México; 23 de agosto de 2018. El 16 de septiembre de 2017 el nuevo gobierno del estado entró en funciones y un nombramiento resultaba de principal importancia: ¿quién se hará responsable del éxito, o lo contrario, de la estrategia de seguridad pública que esta administración aseguró combatiría delincuencia, inseguridad y terror? Junto con el nuevo gobernador, la Secretaría de Seguridad Pública renovaría su personal y en la silla de las órdenes estaría colocada Maribel Cervantes Guerrero, definida como una experta en administración militar para la Seguridad y Defensa Nacional.
Oriunda del estado de Hidalgo, con 47 años, Maribel Cervantes Guerrero es hoy responsable de entregar cuentas en materia de seguridad del Estado de México. Licenciada en Ciencias de la Comunicación y maestra en Administración Militar para la Seguridad y Defensa Nacional por la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea, a la todavía nueva secretaria de Seguridad se le ha introducido como una directora capaz especializada en análisis operativo de la criminalidad, inteligencia, planeación estratégica, terrorismo, cuya versátil formación en técnicas de investigación y policiales la cubrió en o desde países como España, Israel y Estados Unidos.
No es la primera vez que la titular desempeña un cargo de esta envergadura. En 2012, el entonces presidente Felipe Calderón, durante su último período al frente de un país desquebrajado, introdujo a la maestra militar para desempeñarse como la comisionada general de la entonces Policía Federal Preventiva (PFP) luego de que el ingeniero Facundo Rosas Rosas abandonara el cargo para asumir la subsecretaría de Prevención, Vinculación y Derechos Humanos de la misma secretaría que hoy preside Cervantes, pero a nivel federal. Con una promesa que pretendía hacer al estado “la entidad más segura del país”, frente a Del Mazo y Cervantes yacen contundentes cifras como las que arroja el SESNSP en referencia a homicidios en la entidad durante el primer semestre del 2018, donde se contabilizan mil 73 carpetas contra las mil 18 del 2017, lo que representa un aumento del 5.4 % desde entonces. De todos estos homicidios, 717 se cometieron con un disparo; es decir, el 67 por ciento de ellos.

Foto: Info7.
Los primeros seis meses de este año fueron contabilizadas mil 217 víctimas de homicidio doloso, lo que revela un aumento de 45 casos versus los primeros seis meses del 2017 en todo el estado. Lo mismo sucede para el tipificado como feminicidio, con un aumento del 5 % desde el año pasado, y el abuso sexual que recopiló 891 carpetas de investigación contra las 798 de los primeros seis meses del 2017. Es así, entre otras razones de peso, que el voto de castigo dio una tunda al PRI en suelo mexiquense durante las últimas elecciones. A Del Mazo y Cervantes se suma también el alcalde capitalino que se despide con resignación, Fernando Zamora Morales, quien vio cómo las carpetas de investigación por homicidio doloso aumentaron hasta un 175 por ciento de enero a julio de este año y en comparación con el anterior. Aunque gozó de un saldo más blanco entonces, con 12 asesinatos con violencia, este año la cifra negra registró 33.
A esto se suma que Morales no ha podido combatir la inseguridad con la misma eficiencia que su compañero de partido y gobernador del estado, pues delitos como el robo a transporte público colectivo también se incrementó en un 15 por ciento, circunstancia que reflejó el miedo de la población toluqueña en la Encuesta Nacional de Seguridad Pública y en la que más del 80 por ciento de habitantes se siente inseguro en Toluca, la capital del estado más violento del país.
En escueta defensa de Cervantes, cabe reconocer que, han descendido en el estado los índices en materia de robo a transeúnte en vía pública, que arroja un porcentaje de reducción al 32 por ciento en comparación con el año anterior. Y sucede lo mismo con el robo a transporte individual (35 por ciento), el robo a transporte público colectivo (4.6 por ciento), el robo a negocio (14 por ciento) y el secuestros (5 por ciento). Con el alza del homicidio en todas sus formas, el último caso que conmocionó a la capital sucedió el martes 21 de este mes, momento en el que el joven Alejandro Ricardo Montes García perdió la vida luego de resistirse aun asalto a transporte público, escenario que engloba las características de la delincuencia y del asesinato en uno solo.
De Cervantes poco o nada se ha escuchado, se sabe o se ha visto más allá de las fotografías oficiales que se diseminaron al momento de su nombramiento como directora de seguridad. A casi un año de su intervención, al Estado de México aún le resta un largo, tortuoso trecho por recorrer para cumplir la promesa de campaña más significativa del actual gobierno, mismo que hoy debe cuentas claras y resultados a una población cuya percepción de seguridad es prácticamente nula.

Foto: Radio Expansión.
Síguenos