Trabajadores y derechohabientes del ISSEMYM rechazaron las intenciones de incrementar las cuotas de los trabajadores y de cambiar el sistema solidario por uno de cuentas individuales a través de Afores y exigieron que los trabajos encaminados a una nueva Ley de Seguridad Social sean transparentes.
En conferencia de prensa advirtieron que no se aceptará ninguna reforma mientras no se practique la auditoría externa al instituto aprobada por las y los diputados, con ella se buscará sancionar a los responsables del desfalco al instituto obligándoles a devolver el dinero.
Juan Carlos Rojas dijo que las estimaciones del boquete financiero al instituto es superior a los 150 mil millones de pesos, pues durante 20 años ha sido descapitalizado y aseguró que le robaron dinero al ISSEMYM para financiar campañas del PRI.
También acusó que el quebranto fue generado por entes como los municipios y la propia Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) que no enteraron las cuotas que descontaban a los trabajadores, así como por la decisión de subrogar servicios de farmacias, estudios y dar contratos a «compadres» y a políticos que después los pasaron a terceros.
Por ello, explicó, la exigencia de los trabajadores es practicar una auditoría, conocer quiénes fueron los responsables de la descapitalización, fincarles responsabilidades y no cargar a los trabajadores el problema.
También advirtió la necesidad de dar «dientes» al ISSEMYM para que exija el pago de cuotas y aportaciones.
Ramiro Cantoral señaló que este jueves inician una lucha con protestas y campañas masivas para evitar que este 2020 se apruebe una ley del ISSEMYM que dañe a los trabajadores.
Francisco Navarro denunció los malos tratos hacia los derechohabientes, malos servicios, burocracia, diagnósticos equivocados y pidió que tanto las y los legisladores como el gobernador visiten los hospitales para que conozcan lo que la gente tiene que vivir.
Vicenta Ledesma también denunció que hay maestros a quienes no se les quiere atender porque no están dados de alta.
Por su parte, Joel Osorio advirtió que la intención es privatizar la seguridad social y Juan Carlos Rojas refirió que los trabajos para expedir la nueva ley del ISSEMYM deben ser transparentes para que no vuelva a ocurrir lo del año 2000, donde se aprobó una reforma a espaldas de todos a medianoche, en período de vacacional y, además, en fin de semana.