La reciente reforma a los artículos 105 y 107 de la Constitución mexicana, denominada Supremacía Constitucional, aprobada por el Senado y elevada a rango constitucional por los congresos locales, establece la improcedencia de amparos y controversias constitucionales contra modificaciones aprobadas por el Congreso.
Con 85 votos a favor de Morena, PT y PVEM y 41 en contra por parte de la oposición, la medida busca evitar que el Poder Judicial obstaculice las reformas impulsadas por el Legislativo.
De acuerdo con legisladores de Morena, esta iniciativa es fundamental para proteger los cambios constitucionales de interferencias judiciales. Asimismo, responde al «mandato popular» de realizar transformaciones en el sistema judicial y en la elección de jueces, además de avanzar en temas como la eliminación de órganos autónomos.
De esta forma, el morenista Óscar Cantón Zetina justificó la reforma como una medida para evitar que el juicio de amparo se use para impugnar decisiones del Congreso.
La Supremacía Constitucional
El doctor Eduardo Andrade Sánchez, experto en derecho constitucional, explica que la supremacía de la Constitución no es un invento moderno ni una herramienta autoritaria, sino un principio fundamental en la teoría constitucional.
Desde hace décadas, señala, destacados constitucionalistas mexicanos, como Ignacio Burgoa y Felipe Tena Ramírez, han defendido que la Constitución debe ser la norma suprema y que ninguna ley o tratado puede contradecir sus disposiciones. Este principio, consagrado en el artículo 133 de la Constitución de 1917, garantiza que los derechos y normas establecidas en la Carta Magna no se vulneren por interpretaciones judiciales cambiantes.
La razón de reafirmar este concepto radica en la necesidad de proteger la estabilidad y la claridad jurídica en el país. Andrade menciona que permitir que la Suprema Corte de Justicia modifique arbitrariamente la interpretación de la Constitución pone en riesgo la seguridad jurídica y crea incertidumbre sobre los derechos ciudadanos.
A través de esta reforma, se busca garantizar que el Poder Constituyente permanezca como la única autoridad capaz de definir los principios supremos que rigen a la nación.
Aprobación de la reforma en el Congreso del Edomex
La aprobación de la reforma de inimpugnabilidad en el Congreso del Estado de México generó un fuerte debate por parte de los diputados mexiquenses.
La medida, que declara improcedentes los juicios de amparo contra reformas a la Constitución federal, se aprobó por mayoría de votos de los legisladores de Morena y aliados. Sostuvieron que refuerza la supremacía constitucional y asegura que los jueces locales no puedan contradecir las reformas aprobadas a nivel federal.
El diputado morenista Octavio Martínez Vargas destacó que esta medida da continuidad al principio de supremacía constitucional establecido desde 1910 y se alinea con la Ley de Amparo de 2013.
En contraste, la oposición criticó la reforma al considerar que concentra el poder y debilita el sistema de contrapesos democrático. Elías Rescala Jiménez, del PRI, afirmó que esta medida favorece la autoridad de un poder sobre los demás. Por su parte, Joanna Alejandra Felipe Torres, del PAN, la calificó como una venganza política que vulnera los derechos humanos.
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