Santiago Nieto, brazo ejecutor de la 4T contra la corrupción

Toluca, Estado de México; 20 de octubre de 2019.- Santiago Nieto Castillo, director de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), es considerado como el “cazador” de diversos personajes claves del sexenio que encabezó el mexiquense Enrique Peña Nieto. Y es un claro ejemplo de cómo las decisiones de […]

Toluca, Estado de México; 20 de octubre de 2019.- Santiago Nieto Castillo, director de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), es considerado como el “cazador” de diversos personajes claves del sexenio que encabezó el mexiquense Enrique Peña Nieto. Y es un claro ejemplo de cómo las decisiones de terceros, cercanos al ex presidente,  afectaron sus relaciones personales, convirtiendo en verdugos a quienes antes eran aliados.

Nieto Castillo estuvo en el Estado de México como magistrado electoral regional, nombrado por el Senado de la República en 2008.  Se trataba del primer tercio de la administración peñista, donde el segundo hombre más poderoso en el gobierno y operador de temas relevantes era Luis Enrique Miranda Nava, primero como subsecretario General de Gobierno y posteriormente como titular de dicha dependencia.

Los conocimientos en material electoral los fue perfeccionando Nieto Castillo, quien cursó la licenciatura en Derecho en la Universidad Autónoma de Querétaro y el doctorado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), durante su paso por posiciones claves como asesor jurídico del Consejo Local del Instituto Nacional Electoral (INE) en el Distrito Federal.

Además, fue coordinador de asesores y secretario particular de la Contadora Mayor de Hacienda en la Asamblea Legislativa del DF; posteriormente magistrado electoral de la Quinta Circunscripción con sede en Toluca y finalmente titular de la Fiscalía Especializada para Delitos Electorales (FEPADE).

De igual forma, fungió como asesor de Miguel Barbosa, actual gobernador de Puebla, cuando éste se desempeñó como coordinador de los senadores del Partido de la Revolución Democrática, PRD, que fue precisamente uno de los argumentos que se utilizaron para acusarlo de conflicto de intereses, cuando fue titular de la Fepade y salieron a relucir irregularidades del Verde Ecologista de México, derivadas de las denuncias presentadas en su momento por el partido del sol azteca.

Santiago Nieto, brazo ejecutor de la 4T contra funcionarios corruptos

En el 2018, tres años después de su nombramiento en esa Fiscalía, Santiago Nieto fue destituido por órdenes de la entonces Procuraduría General de la República (PGR), aunque en realidad quien tomaba decisiones en el tema de administración y procuración de justicia, era Humberto Castillejos, el consejero jurídico de la Presidencia de la República.

El argumento de la dependencia fue que Nieto Castillo incurrió en violaciones al código de conducta.

Las discrepancia con la gente cercana a Enrique Peña se agudizó en  2015 cuando Santiago Nieto solicitó la consignación ante un Juez de Arturo Escobar, a quien el PRD acusó de cometer delitos electorales cuando fue secretario de Procesos Internos del Partido Verde.

En aquella ocasión se acusó a Escobar de autorizar la compra de las tarjetas "Premia Platino" a proveedores que no estaban registrados por el INE.

El haber sido asesor del PRD propició que el proceso judicial contra Escobar se derrumbara y solamente se impusieran multas económicas al PVEM. Además la PGR investigó a Santiago Nieto por difundir la solicitud de aprehensión contra Arturo Escobar.

En 2017 Santiago Nieto Castillo hizo revelaciones  que molestaron a la Presidencia 

Otro tema que causó molestar en "Los Pinos" ocurrió en 2017, cuando Santiago Nieto reveló que Emilio Lozoya lo presionó para que no lo culpara por desvíos considerados millonarios a favor del Revolucionario Institucional (PRI) durante la campaña presidencial del 2012. 

Cuando sucedieron estos hechos, Lozoya era el encargado de asuntos internacionales de la campaña. Es decir, la presunta “presión” ocurrió en 2012,  pero la dio a conocer Nieto hasta el 2017.

En el entorno político se conoce que Humberto Castillejos habría sido el principal personaje que exigió, al interior de "Los Pinos", la cabeza de Santiago Nieto, pues la intención era sacarlo de la Fepade antes de los comicios presidenciales del 2018.

A Nieto Castillo no le gustó la forma en que salió de la dependencia, ni cómo fue exhibido; al mismo tiempo,  acumulaba mucha información de lo que se hizo en el sexenio de Peña  Nieto, en la federación y antes,  en el Gobierno del Estado de México.

Cabe destacar, por otra parte, que uno de los  personajes influyentes en el entorno del presidente Andrés Manuel López Obrador es Julio Scherer, quien en su momento, contactó a Santiago Nieto, quien años después, apareció en el gobierno morenista como titular de la Unidad de Inteligencia Financiera.

En esa dependencia operaba un conocido suyo, Alberto Bazbaz Sacal, quien en el gobierno peñista del Estado de México se desempeñó como procurador General de Justicia,  -por recomendación de David Korenfeld Federman-,  y que fue otro de los funcionarios que salió del gabinete en medio de escándalos.

El titular de la UIF va contra personajes vinculados con el ex presidente Enrique Peña

Cabe destacar que desde el inicio del sexenio lopezobradorista se conocieron listas de personajes ligados a Enrique Peña que estaban en la mira, todos conocidos por Santiago Nieto. Ejemplos: Emilio Lozoya, Rosario Robles Berlanga, Carlos Romero Deschamps, Gerardo Ruiz Esparza, entre muchos otros.

El golpe al otrora poderoso abogado Juan Collado, es parte de la estrategia, pues con antelación López Obrador había mandado el mensaje, tanto a juristas como a jueces, de que habría persecución a quienes defendieran a personajes ligados a los escandalosos desfalcos durante el pasado gobierno.

En ese entorno se recibió con mofa la advertencia, tan es así que en julio pasado, los Collado reunieron en la boda de su hija Mar, a diversos políticos, empresarios, amigos beneficiados del peñismo y por supuesto a Eduardo Medina Mora, ministro de la Suprema Corte de Justicia, a quien se ha señalado como personaje esencial en la cadena judicial que protegía a los amigos del ex presidente Enrique Peña. 

Los asuntos  de corrupción son administrados con “pinzas” y de acuerdo a tiempos coyunturales; sin embargo,  Santiago Nieto representa el brazo ejecutor de la Cuarta Transformación, donde todos los que tienen las manos sucias, peligran.

Los Castillejos

“El ex consejero jurídico, Humberto Castillejos,  es hijo de Marcos Castillejos, prestigiado abogado asesinado en 2008, afuera de su despacho ubicado en la calle de Mazatlán,102, en la colonia Condesa, de la Ciudad de México; su primo es Raúl Cervantes Andrade, a quien impulsaron para ser procurador General de la República, mientras que Jaime Alejandro Gómez Sánchez, el actual Fiscal General de Justicia del Estado de México, fue su asesor en la oficina de la Presidencia de la República. 

Otro familiar es César Castillejos, titular de Comunicación Social en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), a quien enviaron a trabajar también en la campaña de Alfredo Del Mazo Maza, el ahora gobernador mexiquense. Eduardo Medina Mora fue la joya de la corona que conquistó este clan protegido por Enrique Peña.

Marcos Castillejos  llegó a reunir respaldos contundentes de juristas, políticos, empresarios y grupos fácticos, que heredó su hijo, Humberto Castillejos. El ex consejero jurídico,  trabajó de cerca con ex procuradores generales de la República como Rafael Macedo de la Concha y Eduardo Medina Mora.

Humberto Castillejos, ex consejero jurídico, vinculado a diversas irregularidades en el sexenio de EPN

Este grupo mantuvo el control de las instancias de seguridad pública en el gobierno federal, tanto en el sexenio de Vicente Fox Quezada como en el de Felipe Calderón Hinojosa, a través de Génaro García Luna y Luis Cárdenas Palominos.

Las tres principales fuerzas políticas, a nivel nacional, sabían que tanto García Luna como Cárdenas Palominos y Alfredo Castillo Cervantes, crecieron con el cobijo de los Castillejos. 

La influencia de este grupo es tal, que cuando Luis Cárdenas dejó el control de la Policía Federal, asumió el mando de seguridad de Grupo Azteca, propiedad de Ricardo Salinas Pliego.

En este grupo se identificó a Génaro García Luna, el poderoso jefe de la policía federal en los sexenios panistas y secretario de Seguridad Pública en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, así como a Luis Cárdenas Palominos, el número dos del primero mencionado; quien fue yerno de Marco Castillejos y a otro mexiquense conocido: Alfredo Castillo, ex procurador de justicia mexiquense, hombre clave en el caso Michoacán y otrora comisionado Nacional del Deporte. A los anteriores se sumaban también Monte Alejandro Rubido y Tomás Zerón de Lucio.

Luis Cárdenas, hijo de Cuauhtémoc Cárdenas Ramírez, ex director de la policía judicial con Carlos Hank González en el Distrito Federal y colaborador en la Dirección de Seguridad Nacional con Pedro Vázquez Colmenares y Jorge Tello Peón, dejó la función pública en medio de diversos cuestionamientos públicos,  solo para convertirse en jefe de seguridad del Grupo Salinas, en aquellos años.

A la fecha se sabe que Alfredo Castillo mantiene una relación cercana con Oliver Fernández Mena, ex tenista profesional, a quien se ubica como operador de Jaime Camil. De acuerdo con gente de ese círculo, se dedican a realizar diversos trámites que requieren su especialidad, aunque el ex deportista con cercanía también al ex gobernador César Camacho Quiroz, ha sido expuesto en casos de presunta corrupción, al amparo del poder peñista.