Se dice que

Se dice que
El sistema está hecho para tolerar la corrupción, no para castigarla ejemplarmente. Hace falta una reforma de fondo

El que hace el juego hace la trampa. El INE instalará solo 7 mil 748 casillas para que voten 12.5 millones de ciudadanos, un despropósito francamente. El promedio será un absurdo de 61 casillas por municipio, llámese Ecatepec, Nezahualcóytl, Naucalpan, Texcoco o Toluca. Parece que de lo que se trata es de desalentar la participación. Repugnante, tanto como el silencio de la intelectualidad mexiquense, la academia o los propios partidos. Todos calladitos creyendo que se ven más bonitos. Se hacen como que no entienden la relevancia de democracia participativa.

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Es de tal volumen la cantidad de recursos públicos que corren cada año a través de las entidades públicas estatal y municipales que no hay estructura que alcance para fiscalizarlos ni medianamente. Es muy fácil que los bribones, los corruptos o lo ineptos se salgan con la suya, que se roben el dinero o lo malgasten con toda impunidad. Quienes pensaron que entregando el control del Órgano Superior de Fiscalización a Morena se acabaría mágicamente la robadera por el sistema frenos y contrapesos, se equivocaron, no por tontos, por cándidos.

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Miroslava Carillo es una mujer bien intencionada, pero con pura voluntad no es suficiente. No tiene los instrumentos técnicos ni estructurales para revisar con mejor metodología el gasto público. El sistema está hecho para tolerar la corrupción, no para castigarla ejemplarmente. Hace falta una reforma de fondo.

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Juan Rodolfo está en calidad de prófugo de la opinión pública. Se está escondiendo para no dar la cara por el desastre que dejó en Toluca. Quienes aún permanecen cerca de él, la mayoría socios en sus triquiñuelas, hablan de sus largas borracheras encerrado en su rancho en alguna de sus casas. Es multimillonario, pero totalmente vacío, hueco. Ya ni su religión lo consuela. Justo castigo.

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Lo opuesto el cinismo y desparpajo de Gabriela Gamboa y Patricia Durán. Se pasean por la plaza publica cobijadas por el higinismo, como si hubieran hecho una gracia en los municipios que destrozaron con sus pésimos gobiernos. Lo bueno de que hagan grupo y ronda, es que a los electores les será más fácil identificar por quién no deben votar. Cada quién con su cada cuál.