Las probabilidades de que el expresidente Peña Nieto termine querellado son muy, pero muy bajas. Si se midiera en porcentaje, sería quizá de 3 sobre 100, es el promedio histórico de la UIF de investigaciones que logra judicializar. El asunto es más mediático que legal. Son tiempos políticos y de lo que se trata es de influir en el ánimo de los electores que el próximo eligen gobernador.
*
El enriquecimiento de Enrique Peña y su familia es ostensible, pero nada nuevo. Él y los suyos se hicieron inmensamente ricos no a partir de 2018 cuando asumió la presidencia de la República, sino desde sus tiempos de gobernador de 2005-2011. Todas las pruebas de ese saqueo fueron borradas y se hizo en connivencia de la oposición.
*
«A los amigos, justicia y gracia; a los enemigos, la ley a secas». Jurista como es, el presidente López Obrador ha repetido una y otra vez la frase. A Peña Nieto la 4T le ha dado gracia y, es probable que así continúe. Peña pudo dificultar el ascenso de López Obrador a la presidencia y no lo hizo. Por el contrario, permitió el tránsito democrático. Quizá eso fue lo mejor que hizo durante su mandato.
*
Peña Nieto hizo muchas cosas mal, su gobierno estuvo infectado de corrupción, pero no puede considerársele el peor presidente de las últimas décadas; allí están Diaz Ordaz, López Portillo, Salinas, Zedillo, Calderón y Fox, verdaderos criminales.
*
Qué complicada tarea la del presidente del PRI mexiquense, Eric Sevilla. Le entregaron envuelta para regalo una bomba. Todavía no terminaban él y su equipo el diseño de control de daños por los escándalos de “Alito” cuando le estalla el peñazo. Si se veía cuesta arriba ganar la elección del próximo año, ahora está peor. No se ve cómo, quizá solo un milagro pueda salvarlos.
*
Hoy, en la mesa del Conversatorio, la consejera Karina Vaquera, una de las voces más independientes y sólidas del Instituto Electoral del Estado de México, organizador de las votaciones para elegir gobernador el próximo año. Nos vemos a las 7 de la noche en punto.