Toluca, México; 2 de agosto de 2018. El futuro dirigente de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett Díaz, aseguró que la Reforma Energética no será modificada por la próxima administración federal, y que su labor principal al frente de la empresa estatal será eliminar la corrupción de la institución.
En entrevista hoy en imagen Radio, el aún coordinador de los senadores del Partido del Trabajo en el Congreso de la Unión, indicó que no se necesita abrogar la Reforma Energética para reconstituir a la CFE, a pesar de que él fue uno de sus detractores y durante la campaña presidencial de López Obrador esa fue una de sus propuestas de gobierno.
Ayer Bartlett también informó, al término de la sesión de la Comisión Permanente del Senado, que el gobierno de Andrés Manuel respetará esta reforma, pero se adecuará a para fomentar el libre mercado y la competencia en el sector energético del país.
“Nosotros vamos a respetar la ley como está, lo único que vamos a buscar es que compita realmente la comisión, si no la dejan competir, si suben las tarifas, si compras electricidad, si no generan, pues cómo va a competir. No vamos a tocar nada”.
Al igual que el discurso del candidato electo López obrador, Bartlett ha indicado que el principal problema de la CFE es la corrupción en la administración de la empresa. “La energética es la reforma de mayor calado, la que más recursos atrae en inversión y donde los errores pueden estar en dólares, no son un espacio para la improvisación”, indicó.
Ahogan deudas a CFE
Ayer, el portal Reforma indicó que la cartera vencida de la CFE asciende a los 44 mil 986 millones de pesos con corte a junio de este año. Tabasco (9 mil 754 millones) y el Estado de México (13 mil 383 millones) son las entidades que deben más a la Comisión Federal de Electricidad.
CFE reportó pérdidas por 28 mil 458 millones de pesos en el primer trimestre del 2018, siendo una de las causas la disminución de ingresos por concepto de venta de energía eléctrica, saldo negativo en este rubro por 7 mil 332 millones de pesos.
En 2016, la empresa entregó un informe a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión. Ahí la empresa especificó que la zona sureste de México debe 14 mil 553 millones de pesos; 11 mil 513 millones corresponde a deuda de usuarios, 47 millones adeudos de los gobiernos estatales, 555 millones de las administraciones municipales, 2 mil 314 millones incluidos en “convenios con usuarios” y 124 millones “son incobrables”.
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