El sector financiero parece tomó con optimismo la colocación de la precoz Paulina Moreno García al frente de la Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado de México y, por tanto, encargada del manejo presupuestal mexiquense de alrededor de 360 mil millones de pesos por año. Los bancos acreedores no se han pronunciado públicamente, pero el pago de sus préstamos está plenamente garantizado.
*
A Moreno García el sector empresarial más retardatario ha intentado, infructuosamente, desprestigiarla, poniendo en duda su capacidad y honorabilidad con intrigas y maledicencia. La han querido presentar como beneficiara de su amistad con los hijos mayores del presidente López Obrador, pero todo es una canallada. Moreno es una joven brillante formada sólidamente.
*
El retraso en su nombramiento se atribuye al delicado proceso de entrega-recepción en el que se ha trabajado desde hace semanas. El secretario saliente, Rodrigo Jarque, no deberá estar muy tranquilo, pues se han encontrado muchas inconsistencias en la información de los libros blancos. En otras palabras, no todas las cuentas cuadran y la nueva administración las ha señalado con oportunidad.
*
La designación de la maestra Trinidad Franco, exdirigente del Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México y diputada con licencia del PT, como titular de la nueva Oficialía Mayor del gobierno, fue sorpresiva por decirlo suavecito. Trini, como le llaman sus simpatizantes, es una mujer de lucha y de carácter fuerte. Fue de los pocos liderazgos políticos priistas que se opuso al ascenso de Enrique Peña apoyando abiertamente a su mentor, Isidro Pastor. Trinidad y Delfina tienen muchas cosas en común. Ahora será la responsable de la contratación de bienes y servicios del Gobierno, las compras, pues. Una posición de suma confianza y enorme responsabilidad.
*
Como se esperaba, la gobernadora recurrió al apoyo del ejército para designar como nuevo responsable de la obra pública estatal al general brigadier Carlos Jesús Maza, muy en consonancia con las decisiones del gobierno federal. Un giro de 180 grados. Las cosas empiezan cambiar.