En menos de una semana suman dos los ataques del crimen organizado contra negocios en el Valle de México, cuyos dueños se negaron a pagar extorsiones.
El último hecho, se registró el 16 de julio, cuando varios individuos prendieron fuego al local Emperador del Mueble, en el Barrio de San Agustín, en Chimalhuacán.
Allegados a las víctimas y funcionarios estatales informaron al diario Reforma, que se trató de una represalia por parte de delincuentes, ya que los propietarios se negaron a pagar una extorsión.
El director de la Policía Municipal, Cristóbal Hernández, negó conocer el móvil del ataque.
Según testigos, los agresores descendieron de una camioneta, en menos de 3 minutos rociaron gasolina en los dos niveles del negocio y escaparon mientras ardía.
En el municipio de Nezahualcóyotl, el 13 de julio, delincuentes lanzaron bombas molotov contra una miscelánea ubicada en Avenida Cielito Lindo casi esquina con Calle 8, en la Colonia Esperanza.
"Fue como a las 11 de la noche, llegó la patrulla, pero ya no había nadie", explicó un mando de la Policía Municipal.
Los propietarios del negocio se habrían negado a una extorsión, según agentes.
"Yo sólo sé que se fueron de aquí para siempre", comentó un residente.