Protagonista durante los primeros días de Río 2016, el director de la Conade, Alfredo Castillo, “desapareció” por las críticas y regresó a México desde este viernes, un par de días antes de que concluyan los Juegos, sin ser testigo siquiera de la medalla de plata de Guadalupe González.
Castillo llegó desde la mañana del viernes a la Ciudad de México procedente de Buenos Aires, Argentina, con el objetivo de entrevistarse con el secretario de la SEP, Aurelio Nuño, esto luego de que el presidente Enrique Peña Nieto le negó una charla, de acuerdo a la revista Proceso.
En estos Juegos, el mandamás de la Conade ha estado envuelto en múltiples críticas por diversos motivos: haber viajado a Brasil junto a su pareja sin aclarar con qué recursos fue llevada, el haber estado en un partido del tenista serbio Novak Djokovic en vez de acudir a las pruebas de atletas mexicanos y, desde antes de estos Olímpicos, por haber retirado el apoyo económico a diversas federaciones, entre ellas la de boxeo, que ganó un bronce con Misael Rodríguez.
Además, ha sido señalado por dirigentes del Comité Olímpico Mexicano por diversas irregularidades que de acuerdo al COM atentan contra la carta olímpica. Ejemplo de ello fue el hecho de que varios deportistas vistieran ropa ajena a la marca oficial que se registró ante el Comité Olímpico Internacional.