Los verdaderos fifís están en Valle de Bravo, no en Metepec, Naucalpan, Atizapán o Huixquilucan. No votan allí, pero sí cuidan sus intereses. Prácticamente, todas las familias que aparecen en la lista de las más ricas de México tienen chalet, finca, rancho, hotel o residencia de descanso. Pero a ellos, francamente, les da lo mismo qué partido gane o pierda, no se ocupan de esas cosas. El ambiente electoral se ha tensado en Valle por los desfiguros de la clase política, el pleito está allí y solo allí. El humor social es de tranquilidad, la gente del pueblo está en paz.
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Desde hace más de una década, Santo Tomás de los Plátanos está controlado por el crimen organizado. Medardo Hernández Vera, “Lalo Mantecas”, tenía en ese territorio su santuario y centro de operaciones. Quien aspiraba a cualquier cargo de elección en la región tenía que pasar por su aprobación. Con su muerte las cosas cambiaron, pero no mucho. La renuncia de la candidata de Morena a la alcaldía debe entenderse en el contexto de terror de los mafiosos que hay en la zona. El problema es real, grave y nada nuevo.
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La captura del prófugo alcalde priista de Santiago Tianguistenco es anecdótica. No tiene mayor trascendencia. El impacto mediático es porque se da —quizá no casualmente— en temporada electoral. Diego Eric Moreno Valle tiene dinero de sobra para pagarse una muy buena defensa, los cargos en su contra son graves, pero es probable que logre su libertad como Raymundo Martínez en Toluca. El Poder Judicial podría quedar exhibido una vez más.
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Herminio Cahue es tan hábil como dúctil, no hay duda. El secretario general del SUTEYM, acogido por Luis Videgaray desde le peñato, favorito de la excandidata a gobernadora, Alejandra del Moral, ahora está en los brazos de la sucursal mexiquense de la 4T que le ayuda a sofocar la rebelión al interior del sindicato de burócratas que quiere echarlo. Es útil en estos momentos de cambio.
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De pena ajena la campañita de Elías Rescala que, por lo que se ve, está dispuesto a dejar pedazos de dignidad por unos cuantos votos. El niño bien de Huixquilucan, exanáhuac, se fue a la Barras de Pradera con la banda pesada. La impostura se cuenta sola. Está perdido, así lo advierten todas las encuestas. Nunca ha ganado nada en las urnas y conservará el invicto.