Violencia de género, un gran problema en la UAEMéx

Durante el primer trimestre del año la UAEMex enfrentó una oleada de quejas y denuncias que a través de “tenderos” evidenciaron una problemática que ha estado presente durante varios años

A través de papeletas y los llamados tenderos, las jóvenes universitarias dieron a conocer a principio de año los abusos y acosos que enfrentaban en espacios de la Universidad Autónoma del Estado de México. El análisis efectuado a la información de mil 450 de esas papeletas revela que en 324 casos (22.37%) se denunció acoso sexual por parte de docentes.

Así lo destaca el estudio elaborado por María Paulina Bernáldez Aguilar. Angelita Garduño y Marcela Venebra del programa “Vivas. Defensoras Universitarias”, dependiente de esta casa de estudios y que tuvo como propósito conocer con mayor precisión las inquietudes y el sentir de las estudiantes.

Los tenderos se colocaron en las 25  unidades académicas, facultades y preparatorias y fueron parte fundamental en las protestas y movilizaciones que realizaron los universitarios en el primer trimestre de 2020,  inicialmente en contra de la violencia de la que son víctimas las mujeres, más tarde darían pie a otras demandas y peticiones a las autoridades de la UAEMex.

El análisis  respectivo “revela las principales inquietudes, temores y necesidades de la comunidad”. De acuerdo con la frecuencia de las quejas manifestadas en las papeletas, la información se clasificó en siete categorías: 

1. Uso inapropiado de lenguaje: expresiones sexistas, machistas, misóginas, sexuales o inapropiadas o de doble sentido

2. Acoso sexual, hostigamiento

3. Abuso sexual

4. Procedimientos

5. Pronunciamientos ideológicos sin núcleo acusatorio

6. Acoso laboral

7. Ataques sexuales en espacios públicos: transporte público, calles, fiestas.

Los resultados del análisis, de acuerdo con la distribución de las quejas totales según categorías, son: 32.6%  pronunciamientos ideológicos,  22.37% acoso sexual por parte de los docentes, 10.44% acoso por parte de otros estudiantes y 13.35% como uso inapropiado del lenguaje. El 21.24% restante correspondió a las demás categorías.

Sin embargo, las responsables del programa “Vivas. Defensoras Universitarias” que realizaron este estudio aclararon que en este tipo de expresiones es “difícil distinguir el afán de linchamiento de la expresión honesta”, situación que ha dificultado efectuar un análisis más puntual de los pronunciamientos contra personas concretas y a la que solo se denunció formalmente en algunos casos.                          

“Es importante señalar –precisan- que las papeletas así exhibidas no pueden considerarse instrumentos legales de queja, denuncia o acusación dada su naturaleza anónima y no probatoria de dichos documentos.  No obstante, es importante recuperar, sistematizar y capitalizar la información que esta forma de protesta arroja, pues nos indica la naturaleza, nivel y particularidades atinentes a la percepción de la violencia entre la comunidad universitaria, principalmente entre las mujeres…”