En patio ajeno los Astros de Houston consiguieron su primer título de las Grandes Ligas, al derrotar en el séptimo juego a los Dodgers de Los Angeles, con un marcador de 5-1.
Los Astros llegaron a una nueva final de la Serie Mundial después del 2005, cuando cayeron ante las Medias Blancas de Chicago; por su parte, los Dodgers de Los Angeles buscaban conseguir su séptimo campeonato, pues el último lo lograron en 1988 al vencer a los Atléticos de Oakland.
El juego se decidió prácticamente desde el primer y segundo inning, cuando los angelinos se adelantaron por 5 carreras, ventaja que ya no perdieron gracias a una estupenda labor de picheo y a la defensiva.
Por los visitantes destacó el jonronero George Springer, quien en el segundo episodio consiguió un vuelacercas de dos carreras que marcó el rumbo del encuentro y que a la postre fue elegido como mejor jugador del partido.
“Esto fue grandioso, salimos agresivos al principio, esa era la mejor función, caerles encima desde el principio. Esto (el trofeo) también es de mis compañeros”, señaló Springer tras recibir el trofeo MVP.
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