Toluca, México; 15 de junio de 2018. La Copa del Mundo es la justa futbolística más importante en donde se pone a prueba a las naciones más importantes de la Tierra que practican el deporte, pero en esta ocasión también se pone en práctica una nueva forma de juzgar lo que sucede sobre la cancha con la implementación del arbitraje asistido con video.
La tecnología se está empleando en la Copa del Mundo por primera vez y tiene el potencial de cambiar el resultado de los partidos, pues podría decidir el futuro del torneo al revertir o disputar algunas de las decisiones más importantes que tomen los árbitros durante las competencias con el objeto de que éstas sean justas y procurar que, en efecto, gane el mejor.
Sin embargo, tanto los operadores como los árbitros mismos reconocen que esta tecnología se encuentra aún en una etapa muy temprana de desarrollo y que ninguno sabe exactamente cómo es que deben utilizarla a favor del juego. No obstante su compleja apariencia, en realidad resulta bastante simple: se trata de un árbitro adicional que observa el partido a través de una pantalla y conseja al réferi de cancha sobre las decisiones que debe tomar. En la práctica, por otro lado, establecer el criterio para la intervención de este árbitro asistido con video es aún algo que no queda bastante claro.
¿Cómo funciona?
Hay 13 oficiales que pueden ser elegidos video-árbitro. Todos se sientan en un centro especial instalado en Moscú, sin importar dónde esté sucediendo el juego, mientras portan y visten el equipo completo, como si estuvieran listos para saltar a la cancha en cualquier momento. De ellos, se elige uno para cada juego y tendrán, a su vez, un equipo de tres asistentes.
Allí recibirán una transmisión desde el interior del estadio compuesta por una cantidad de cámaras, incluidas las phantom, que los árbitros pueden consultar siempre que sea necesario. El video-árbitro mira, junto a sus asistentes cada juego y, si ven algo mal, pueden señalar las irregularidades al árbitro en cancha; si éste cree que algo anda mal, puede ponerse en contacto con el video-árbitro. Cabe señalar que el árbitro asistido con video sólo contribuye con asesoría y cualquier decisión, en última instancia, recae en el árbitro en cancha, incluso si se le ha recomendado al distinto desde cabina.
¿Qué puede recomendar el video-árbitro?
La FIFA podrá haber permitido que la tecnología entre a la Copa del Mundo, pero ha limitado severamente las circunstancias en las que puede ser utilizada. En total, hay cuatro tipos diferentes de incidentes que pueden ser revisados:
Goles. En efecto, el sistema puede emplearse para verificar que un balón haya atravesado apropiadamente la línea de gol, pero también puede disputar la trayectoria del balón hacia la portería. Es decir, si se detectra una irregularidad en la ruta que toma el balón hacia la meta, el video-árbitro puede anular el gol.
Penales. Se usa para verificar si es que se debió haber otorgado un tiro penal si no fue así, y viceversa.
Tarjetas rojas. Si el árbitro ha decidido que se ha cometido una falta, el video-árbitro puede asistir en la decisión de una tarjeta roja.
Identidad equivocada. Permite detectar si se está castigando con una tarjeta al jugador equivocado. Si es así, el árbitro en cancha puede ser corregido por el asistido con video para evitar confusiones durante la emisión de tarjetas que puedan expulsar a un jugador que no lo merecía.
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¿Cómo saber cuándo lo están usando?
Todo el sistema de se centra en los árbitros, no en los espectadores. Lo que significa que la prioridad no es aclarar cuándo o si el sistema se está utilizando. De este modo, puede utilizarse de una de tres formas.
- En algunas circunstancias, el árbitro puede simplemente recibir un mensaje por auricular, indicando que se está revisando una decisión. Durante este momento, éstos recibirán noticias de los árbitros asistidos con video, quienes podrían aconsejar que cambien o que se atengan a una decisión. Aquí es posible que los espectadores ni siquiera sepan que esto está sucediendo o que simplemente vean al árbitro tocar su auricular.
- Otro escenario posible ve el proceso de video involucrado de manera más oficial y el árbitro dibujará un rectángulo en el aire para indicar un televisor. Eso puede ser desencadenado por el árbitro o por los video-árbitros, quienes nuevamente se comunicarán a través del auricular. La decisión será transmitida al árbitro, que luego hará que el rectángulo firme para que continúe el partido.
- El último es el más claro, pero podría ser el más confuso y frustrante en el estadio. Los árbitros se dirigirán a una pequeña estación de revisión al costado de la cancha después de hacer el símbolo de la pantalla con las manos, donde también podrán ver las mismas repeticiones que se muestran a los oficiales de asistidos con video. Luego, consultarán juntos y tomarán una decisión.
¿Qué verán los espectadores?
Quizás la parte más confusa del video-arbitraje es el hecho de que los espectadores no verán ninguna de las repeticiones, o incluso no necesariamente sabrán lo que está sucediendo. A lo sumo, verán al árbitro hacer el signo de la pantalla del televisor y tal vez dirigirse a la cabina de revisión. Por otro lado, los televidentes sí verán las mismas imágenes que los árbitros, por lo que la decisión no debería ser tan impactante para ellos. Sobre esto, tómese nota que los árbitros no pueden ver ninguna de las imágenes transmitidas en las señales de televisión ni escuchar ningún comentario que pueda influir en su decisión imparcial.
¿Qué diferencia hace para los jugadores?
En el sentido más directo (es decir, descartando cualquier argumento sobre si cambiará el ritmo de los juegos), el video-arbitraje no permite a los jugadores hacer nada específico. De hecho, el único cambio importante en las reglas es lo que los jugadores no pueden hacer y eso es que no deben hacer la señal de revisión por sí mismos demandando una revisión al conjunto de oficiales.
¿Por qué es tan controvertido?
Tomó mucho tiempo para que se introdujera la tecnología de asistencia en video y esto es resultado parcial a que mucha gente teme que pueda arruinar el flujo y la sensación del juego.
Los críticos sugieren que los árbitros que marcan las decisiones usando la tecnología y luego se toman el tiempo para revisar el video para tomar una decisión puede causar interrupciones en el juego. También sugieren que neutralizará parte del encanto del arbitraje: discernir sobre un incidente poco claro que se preste a cuestiones de opinión.